El papel protagonista de la mujer centra la conversación en las recepciones

Fue precisamente con este con el que la Reina doña Letizia departió durante unos segundos durante el saludo protocolario previo a la foto oficial en el Salón de Consejos, provocando un ligero tapón en la fila que seguían los galardonados. Con ellos, una vez inmortalizados en la foto de familia, los miembros de la Familia Real se mostraron «entrañables» y departieron de forma «amena».

Hubo en la conversación un tema central, coincidieron en explicar el oftalmólogo Luis Fernández-Vega (expresidente de la Fundación Princesa de Asturias) y el empresario asturmexicano Antonio Suárez, ambos Medalla de Asturias: el preponderante papel de la mujer en la sociedad actual y, más concretamente, en el mundo del trabajo. «Es un asunto de conversación muy habitual hoy en día», reflexionaba Fernández-Vega, y que también interesa a la Familia Real, como pudieron comprobar. «El movimiento femenino es una ola que viene sola y es importante que sea así», anotó Antonio Suárez, presidente del holding GrupoMar. «Hace cuarenta años, en una escuela de Ingeniería de cada cincuenta alumnos había tres mujeres y cuarenta y siete hombres. Ahora ocurre al revés, las Universidades se nutren de más mujeres que hombres y es lógico que dentro de pocos años haya tantas o más mujeres que hombres en puestos directivos, porque su preparación es mayor. El mundo ha cambiado», sostuvo el empresario asturimexicano. Suárez abogó por la igualdad de condiciones laborales entre mujeres y hombres.

La cada vez mayor presencia femenina en las aulas universitarias a la que Antonio Suárez hacía referencia se vio constatada en la foto de familia que los Reyes y sus hijas se hicieron con los mejores estudiantes de la Universidad de Oviedo. Entre ellos se encontraban Deva Méndez, Premio Fin de Carrera del grado de Biología que en la actualidad cursa en Bélgica un máster Erasmus Mundus en Ecología Tropical; Sara Roces, graduada en Geología que cursa un máster en Recursos Minerales en la Universidad de Granada y otro de Recursos Geológicos en la Universidad de Oviedo, y Carmela Suárez, que trabaja, prepara oposiciones y pronto iniciará el doctorado.

Fueron los Reyes, explicaron, quienes llevaron la iniciativa en la conversación con los universitarios, interesándose por sus disciplinas y sus ocupaciones actuales. Como ya hicieran el año pasado, delante de la Princesa Leonor y la Infanta Sofía, les pidieron algún consejo para cuando ambas enfrenten su estudios universitarios. «Que disfruten esa etapa, la aprovechen al máximo y hagan muchos amigos» fueron sus recomendaciones.

Tras el besamanos de presidentes de los jurados y patronos, llegó el turno de los galardonados con los Premios Princesa de Asturias 2023. El Salón Covadonga del Hotel de la Reconquista fue el escenario en el que se produjo el primer encuentro oficial de los premiados. No estaban todos. El estadounidense Jeffrey Gordon no pudo desplazarse hasta Oviedo debido al reciente fallecimiento de su mujer y Emmanuel Carrère (que en la ceremonia de esta tarde representará a su madre, Hélène Carrere, premio Ciencias Sociales, fallecida en agosto) no llegó a tiempo para poder asistir a la foto de familia. Fue con la hermana y la pareja del Premio Princesa de Comunicación y Humanidades, Nuccio Ordine (fallecido en junio), con el que se inició el besamanos en el que la Princesa Leonor se encargó de entregar las insignias a los premiados. Ya inmortalizados en la foto oficial de esta edición de los Premios, el Rey (con una muñequera en la mano izquierda por una tendinitis) se acercó al maratoniano Eliud Kipchoge para intercambiar unas palabras mientras que la Reina y sus hijas hacían lo propio con la actriz Meryl Streep.