La Princesa, en el atril. ÁLEX PIÑA
Premios Princesa de Asturias 2022

Leonor: «Somos conscientes de que la situación actual no es fácil»

Palabras de esperanza. Doña Leonor destacó que en un mundo «que ha cambiado y sigue cambiando», la mejor manera de progresar «pasa por mantener el entusiasmo»

AIDA COLLADO

Sábado, 29 de octubre 2022, 01:22

Desde que ayer pusiera un pie en Asturias, la Princesa mostró no solo una imagen, sino un talante más maduro. Tal y como ella misma recordó en su discurso, doña Leonor cumple 17 años en unos días, una edad en la que se impone la curiosidad por un mundo en cuyo futuro está llamada a jugar un papel importante y, también, en la que la prudencia y la humildad sirven siempre de aliadas a los jóvenes dispuestos a beber de la experiencia de las generaciones anteriores. Y sobre estos mimbres construyó la Princesa su alocución, que comenzó reconociendo que «el trabajo excelente, el esfuerzo constante y el sentido de la responsabilidad tienen grandes resultados», tal y como demuestran los galardones que llevan su nombre. La Princesa aseguró ante los presentes: «Descubrir la obra de nuestros premiados me ayuda a entender mejor el mundo que nos rodea». Su labor, añadió, «me empuja, a todos en realidad, a seguir aprendiendo. He leído sobre cada uno de ellos y me impresiona todo lo que han conseguido. me importa y me interesa, porque sé que su trabajo, sus esfuerzos, miran al futuro e influyen en el presente». Por eso, tuvo palabras para cada uno de ellos. Y, en todos los casos, no solo elogió su trayectoria, también fue un poco más allá en su análisis.

Publicidad

A María Pagés y Carmen Linares las definió como «dos artistas excepcionales» que se encargan de recordar que «el flamenco es un arte vivo, rico, poderoso, universal, nuestro». Un «arte culto» en el que las galardonadas «alcanzan la armonía de quien evoluciona y mantiene a la vez la esencia de la tradición». Reconoció, también, la importancia y el impacto que le causa que Adam Michnik «no tenga miedo a hacer un periodismo responsable y riguroso». El polaco, «gran defensor de la democracia, trabaja por la reconciliación entre sus conciudadanos y el europeísmo más optimista». Y, por ello, demuestra «un espíritu ejemplar». A Eduardo Matos Moctezuma agradeció que «nos descubre el pasado para comprender lo que somos y lo que las sociedades antiguas y actuales tenemos en común».

Sentidas palabras tuvo para el dramaturgo Juan Mayorga y su convencimiento de que «el teatro es el arte del encuentro, por tanto, de la relación actor-espectador, y que nos ayuda a examinar las vidas reales y las vidas posibles». «Me importa», insistió a cada paso. «Y también que este premio sirva para que el arte, la cultura, la especial mirada -filosófica y matemática- de Mayorga sean valorados como merecen y nos ayuden a hacernos preguntas».

Ver fotos

Imagen. Elegancia en la alfombra azul de los Premios Princesa

Habló también de los premiados en Ciencia y sus investigaciones sobre Inteligencia Artificial, que necesitan «recursos y atención». Y lo hizo ante el gesto aprobatorio de la Reina, que la escuchaba con visible orgullo. Un orgullo que tuvo su reflejo en el patio de butacas, donde Paloma Rocasolano se emocionaba al escuchar a su nieta.

Elogió la figura del deportista que no puede «progresar en su carrera porque se ha obligado a huir de su país», en alusión al galardón otorgado al Equipo Olímpico de Refugiados y su Fundación. Al arquitecto Shigeru Ban y su preocupación por las personas que han perdido su casa en una catástrofe natural. El empeño de Ellen MacArthur para que «gobiernos, instituciones científicas, grandes empresas y la sociedad trabajen juntos para que se utilicen mejor los recursos naturales».

Publicidad

«Me importa, en definitiva, que estemos todos aquí celebrando y aprendiendo», dijo antes de aplaudir también el «esfuerzo y generosidad» a quienes «de mil maneras apoyáis a la Fundación Princesa».

No fue un discurso vacuo: «Los jóvenes somos conscientes de que la situación actual no es fácil, de que el mundo ha cambiado y sigue cambiando y de que la mejor manera de progresar pasa por mantener el entusiasmo por conocer, equipararnos con responsabilidad y capacidad de esfuerzo, aprender de los que saben, de quienes hacen lo suyo de manera impecable, a menudo en silencio», concluyó.

«Escuchar, admirar y reconocer la excelencia de nuestros premiados nos hace sentir que las cosas siempre pueden cambiar para bien», zanjó entre aplausos. Prudencia y humildad.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad