Los incendios en Asturias, «la mayor devastación en 30 años»

Pasaban pocos minutos de las cinco de la tarde cuando se pronunció la frase que toda la región llevaba esperando escuchar desde el miércoles. «Ahora mismo, no tenemos ningún incendio activo en Asturias». Activo como sinónimo de peligroso, porque anoche se trabajaba en el control de 22 focos.

La frase la dijo Óscar Rodríguez, gerente del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA), durante la visita que el presidente asturiano, Adrián Barbón, realizó al concejo más afectado por el, según los técnicos, «mayor incendio en Asturias en 30 años». El concejo de Valdés tiene «la mitad de su superficie calcinada», afirmó el alcalde, Óscar Pérez. Lo que supone «14.000 hectáreas arrasadas». Más superficie que la que ocupa, por ejemplo, todo el municipio de Mieres. Un agotado, pero contundente, Barbón confesó: «No sé qué más puede pasar en esta legislatura».

La lluvia «y el incansable trabajo de Bomberos de Asturias, de los que estoy muy orgulloso, así como de todos los refuerzos que hemos tenido», hasta un máximo de 828 personas el viernes, «han evitado una catástrofe aún mayor» que la ya causada. «Pusieron en riesgo cientos de vidas. Estos terroristas pagarán con la cárcel», sentenció el presidente.

En su «gracias a todos» incluye «a la Unidad Militar de Emergencias (UME), la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), los agentes de Medio Rural, la Guardia Civil, los voluntarios de Protección Civil y, también, a los ganaderos», a los que, por su parte, el alcalde de Valdés calificó de «verdaderos héroes». «Para los que les acusan, tengo que decir que ellos han contribuido a salvar al concejo». Mientras se espera el balance final de daños, «que no llegará hasta el lunes, cuando hagamos la revisión con el helicóptero», explicó Rodríguez, el presidente regional anunció ya que «ahora empieza la reconstrucción». Una tarea para la que adelantó que «habrá ayudas del Principado, que ya estamos estudiando cómo canalizar», pero para las que reclamó «la declaración de zona catastrófica» por parte del Gobierno central.

Una «reconstrucción» para la que también llamará a las puertas de la Unión Europea. «Hemos hablado con nuestro eurodiputado, Jonás Fernández, porque hay fondos europeos también para las ayudas. Son muy estrictos, pero vamos a intentarlo», aseguró Barbón.

Porque, aunque ni hectáreas ni euros perdidos son posibles calcular aún, sí tiene claro que «el concejo de Valdés ha retrocedido a 25 años atrás, como me dijo llorando el alcalde», lamentó Barbón. «Acabamos de hacer una inversión millonaria en fibra, que se ha perdido», apuntó.

Una línea de trabajo, la de abrir ayudas regionales y solicitar estatales y europeas, que no olvida la otra. «La de que los autores de estos incendios intenciones acaben con sus huesos en la cárcel». Afirmó que «el Principado se presentará como acusación particular».

Porque el presidente del Gobierno regional sigue convencido de que «estamos ante una acción terrorista» cometida por unos «delincuentes» que «pusieron en riesgos cientos de vidas». Una aseveración que reiteró tanto en su rueda de prensa matinal en La Morgal, con el comité de crisis, como en su visita posterior a Oviedo y la vespertina a Valdés. «Puede que los ciudadanos no se den cuenta, pero estuvieron en riesgo cientos de vidas. Si el incendio llega a entrar en Luarca... No quiero ni pensarlo... Y el incendio del Naranco podría haberse llevado por delante Oviedo». Pese a que en su visita a Asturias el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, achacó los incendios «al cambio climático», el líder de los socialistas asturianos fue contundente: «Aquí, además de cambio climático, lo que hay es la mano criminal de terroristas ».

Y lo dice con argumentos técnicos. «El cambio climático existe y es cierto que estamos en un momento de altas temperaturas no habituales, pero ¿cómo se explican los doce focos simultáneos en el Naranco? O que cuando la cabeza del fuego de Valdés avanzaba contra el viento, aparecieran focos en la otra dirección. No tiene sentido». Como tampoco que «haya habido 135 focos a la vez».

Tampoco eludió las críticas a la falta de medios, como las doce autobombas nuevas sin uso, o los montes sin cuidar. Respecto a la primera, el gerente del SEPA dijo que «ningún incendio ha estado sin autobomba porque tengamos las nuevas en proceso de mejora». Sobre la segunda, Barbón afirmó «entre quien tiene el monte sin limpiar y el que prende la mecha tengo claro quién es el culpable».

• Temas
• Adrián Barbón
• Bomberos de Asturias
• Guardia Civil
• Naranco
• Oviedo
• Valdés
• Incendios forestales