Comienza la segunda fase de la búsqueda de los sepultados en Zaldibar con la ayuda de excavadoras

La búsqueda de los operarios tuvo que ser suspendida por temor a que la lluvia pudiera provocar nuevos desprendimientos en la zona. El suelo sobre el que se ha derrumbado la escombrera es inestable, tal y como han comprobado los especialistas. Según ha explicado Zubiaga, se ha dado por concluida una primera fase del rescate de los desaparecidos, en la que se ha trabajado a mano allí donde, por los testimonios del personal del vertedero, y por los lugares marcados por los perros, podrían estar los infortunados trabajadores.

Este domingo se ha emprendido ya la segunda fase de los trabajos de rastreo, pero ya «con más profundidad», con la ayuda de excavadoras «en una zona donde hay alguna posibilidad» de localizarlos, en vez de hacerlo manualmente por medio de los operarios y los perros de salvamento. Eso sí, «con todas las precauciones. Hay una limitación importante. La seguridad de los trabajdores», ertzainas, bomberos y personal de empresas privadas que participan en las labores de búsqueda. Además de «la estabilidad de la propia ladera. Hay que procurar que no haya un desprendimiento», para lo que se cuenta con la permanente supervisión de geólogos, que «han determinado que la ladera es inestable y existe un riesgo».

La conclusión de esta fase dará paso a una tercera, de «estabilización completa de la ladera» y de la excavación y traslado de los residuos a su nuevo emplazamiento. A esta parte de los trabajos se ha referido la viceconsejera de Medio Ambiente, Elena Moreno.

La viceconsejera ha asegurado que «la excavación del vertedero no será cosa de un par de días, llevará bastantes meses de trabajo». Según ha explicado, ahora «se está examinando todo el expediente y la autorización con la que estaba trabajando esta empresa», la propietaria de la escombrear, «para comprobar si se correspondía con la documentación que había facilitado a Medio Ambiente». Es decir, para comprobar si la empresa ceñía su actividad a los parámetros para los que tenía permiso. «Actuaremos con el máximo rigor si vemos que esto no es así», ha asegurado.

Moreno ha recordado que su Departamento tiene «un estudio de establidad de mayo de 2019 que nos decía que el vertedero era estable» y que Medio Ambiente no había recibido «ninguna denuncia de grietas o de movimiento de tierras por parte del promotor».

Además, la viceconsejera ha señalado que se ha instalado una unidad móvil de la Red de control de calidad del aire «en la zona del antiguo peaje de Ermua», a pocos metros de la lengua de escombros que cubrió la autopista, «que está operando desde ayer» y cuyos primeros resultados reflejan que el estado del aire de la zona es el habitual. También se están tomando muestras «en varias calles de Eibar».

«Hemos hecho mediciones también en los ríos que pudieran esar afectados por los lixiviados» del vertedero, «y no hemos detectado que estén llegando» a los cursos de agua.

Moreno también se ha referido al incendio, del que esta mañana se ocupaba un helicóptero de SOS Cantabria, que ha efectuado 10 pasadas y ha arrojado 10.000 litros de agua sobre las llamas.

El Gobierno vasco está estudiando donde llevar los vertidos. Al mismo tiempo, criticó la divulgación de muchos «bulos» sobre la existencia de otros agentes contaminantes en el vertedero.