La economía circular despega en Asturias apoyada en los fondos de recuperación de la UE

La visión de Cuesta no pasa de ser una percepción apoyada en el trabajo diario de una entidad que canaliza e impulsa muchas nuevas iniciativas empresariales.Pero hay un dato que avala la tesis del responsable de I+D+i del Idepa: el Principado cuenta ya con 16 proyectos por valor de 688 millones de euros para optar a los fondos de recuperación europeos que, se espera, comiencen a activarse al inicio del verano con las convocatorias ministeriales.

Las líneas de trabajo que se plantean en estos proyectos, según explicó el consejero de Industria, Empleo y Promoción Económica, Enrique Fernández, son varias y van desde la revalorización de gases siderúrgicos a la investigación y producción de nuevos materiales, pasando por la propia gestión de residuos y el aprovechamiento de subproductos.

El propio Principado viene trabajando en algunas de estas líneas desde hace varios años.El Idepa ha puesto en marcha un 'hub', alineado con su estrategia de especialización inteligente, que tiene por objetivo potenciar la circularidad en lo que denominan los «grandes consumidores de materiales» de la región. Las grandes industrias asturianas tiene un consumo muy elevado de materiales que acaban transformando en productos como el acero, el cinc, el aluminio o el vidrio. Estos elaborados, a su vez, se consumen en grandes cantidades en la región y generan subproductos, ya durante su fabricación, con capacidad de ser reaprovechados. «Nos centramos en estas empresas. Sus subproductos pueden tener un impacto económico muy fuerte», explica Jaime Cuesta.

La iniciativa empezó a gestarse hace dos años con la colaboración de empresas, centros tecnológicos y la Universidad de Oviedo. El reto era, viendo cómo la particularidad de la industria asturiana abría una ventana de oportunidad, aprovechar los recursos para lograr un fuerte impacto en términos de reutilización. La iniciativa ya se traduce en un mapa de residuos, pero también en uno de plantas donde probar proyectos de economía circular ligados a los materiales con los que trabaja la gran industria asturiana. Entidades como TSK, Idonial, el Instituto de Ciencia y Tecnología del Carbono o la propia ArcelorMittal cuentan con plantas donde comprobar los proyectos, que ya llegan con cierto grado de maduración a estas instalaciones. La propia web del Idepa recoge el mapa de las instalaciones, que se segrega por diferentes parámetros con la idea de ponérselo un poco más sencillo a los emprendedores. «Las plantas ya están funcionando y son de demostración. Los proyectos están casi escalados, no pensamos en iniciativas muy pequeñas», explica Jaime Cuesta.

El capital privado también se está moviendo en torno a la economía circular. La firma Preco prevé abrir en 2023 una planta en el puerto de El Musel dedicada a la valorización de residuos plásticos para la producción de biocombustible. La empresa, dedicada íntegramente a la economía circular, plantea una inversión de 74 millones de euros sobre una parcela de 30.000 metros cuadrados, ampliables en otros 20.000, y que daría empleo a 70 personas de forma directa y a otras 250 de manera indirecta.

No es la única iniciativa que en los últimos tiempos se ha puesto sobre la mesa. La firma General Alquiler de Maquinaria (Gam) estudia implantar en la región una planta de «refabricación» de maquinaria, un proyecto que supondría una inversión inicial de 10 millones de euros y una plantilla aproximada de 40 personas, aunque con la previsión de crecer y alcanzar los 100 trabajadores en cinco años. La localización aún no está cerrada y Asturias deberá competir con León por un proyecto que se ha presentado como manifestación de interés a los fondos europeos.

Otra empresa que ha apostado fuerte por la economía circular en la región es Baldajos, que en 2012 abrió una planta en Tuilla dedicada a los neumáticos recauchutados para los sectores del transporte de viajeros y mercancías. En 2019, esta compañía decidió ampliar su inversión con otros tres millones de euros parta fabricar neumáticos OTR, dedicados a la maquinaria industrial y que parten de un producto ya usado. Solo un ejemplo más de una economía que toma impulso en Asturias.