«Esto se veía venir, llevamos años avisando», claman los vecinos de Aller

«A ver si ahora se ponen a reflexionar, porque esto estaba cantado», decía Armando Valdés, de la asociación turística Aller Experiencias. Este colectivo lleva tiempo reclamando medidas de mejora para esta carretera que se caracteriza por su peligrosidad. Y es que han sido muchos los sustos por avalanchas en el que es el principal acceso a las estaciones de esquí de Fuentes de Invierno y San Isidro, ya en la provincia de León. Un motor económico importante para la zona que precisa de «soluciones» para este problema.

Fernando Cordero, hostelero en La Raya, quien participó en el rescate del conductor herido, se quejaba amargamente de la situación de la carretera. «Llevamos décadas exigiendo una solución para ese punto».

Desde la vertiente leonesa del puerto también critican la «inacción» del Principado para poner fin a un problema que «se repite año tras año». «Los aludes siempre caen en los mismos sitios, no pueden decir que les pille de nuevos y es indignante que al final haya terminado sucediendo esta desgracia», apuntó el joven Javier Rey, vecino de la localidad de Redipollos. La hostelera Paula García, propietaria del restaurante Mirasierra en Puebla de Lillo, se mostraba de acuerdo. «Gran parte de nuestra clientela viene de Asturias y el de los aludes en la zona de Riofrío es un tema recurrente, por desgracia», señaló.

Preguntado ayer sobre este asunto al consejero de Medio Rural y Cohesión Territorial, Alejandro Calvo, anotó que lo que ahora toca es dar apoyo a las familias de las víctimas y poner en valor el trabajo de este personal. «Tiempo habrá de hacer otras valoraciones», añadió.

El presupuesto regional contempla casi 55.000 euros para la redacción del proyecto de reparación y ampliación de las pantallas protectoras y viseras.