Secciones
Servicios
Destacamos
JUAN GARCÍA
RIBADESELLA.
Sábado, 26 de octubre 2019, 00:09
Concluido el último episodio de intensas lluvias, el Ayuntamiento de Ribadesella hace balance de daños y piensa en poner en marcha, cuanto antes, el protocolo de actuación que permita limpiar la playa de Santa Marina con rapidez y sin traba burocrática alguna. La crecida ... del río Sella volvía a arrastrar gran cantidad de materiales -vegetales fundamentalmente- que se acabaron depositando en el arenal, aunque esta vez en menor cantidad.
No obstante, el alcalde espera que la Delegación del Gobierno convoque a las partes implicadas -Demarcación de Costas, Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Consejería de Medio Ambiente y Ayuntamiento- para determinar los términos a seguir a la hora de intervenir en la playa. «Porque si lo tiene que limpiar nuestro Ayuntamiento alguien nos tiene que apoyar porque nosotros solo somos los receptores, no los generadores de esa basura. Así que alguien más tendrá que poner y ayudar en esta limpieza», afirmó Ramón Canal.
El regidor anunció que seguirá peleando para que el resto de administraciones públicas reconozcan este «hecho diferencial» y para acabar de una vez por todas con el conflicto de intereses ahora existente. «Si a mi me dicen que el responsable es el Ayuntamiento, que limpie la playa y que tenemos autorización, que no me vengan después con rollos de que si saco arena o tengo problemas con el Seprona. Que se aclare, que se firme un protocolo claro sobre lo que hay que hacer en cada momento», añadió el regidor.
Ramón Canal reconoció que la sucesión de acontecimientos vividos esta semana a consecuencia de las lluvias, «con agua por todas partes, nos desbordó por completo». No obstante, los puntos conflictivos siguen siendo los de siempre, los más recurrentes cada vez que llueve: Santianes, Vega, Camangu, San Pedro y carretera San Pedro. El regidor considera que la limpieza de las riegas servirá para «disminuir o retrasar el efecto devastador» del agua. Por ese motivo, anunció que el Ayuntamiento comenzará a limpiar los tramos urbanos de las riegas y ríos del concejo, tal y como recientemente se acordó con la Confederación Hidrográfica del Cantábrico.
Uno de los puntos más urgentes es el localizado en el puente que une las urbanizaciones de La Juncalera y la Corbeta Oeste. Los tubos están taponados y hay que desatascarlos, aunque habrá que contar con las empresas de servicios, ya que por ellos también pasan diferentes cableados. «Tenemos que darle desahogo, porque así reduciremos la acumulación de agua en la carretera de San Pedro, a la altura de la urbanización Sella Mar», añadió Canal. Parecida situación tiene el puente que da acceso al camping de Vega, donde la acumulación de árboles y raigones generó un tapón que provocó el desbordamiento del río por la carretera de acceso al pueblo.
Por otro lado, la cueva de Tito Bustillo permanecerá cerrada hasta el 30 de octubre mientras se realizan labores de limpieza en su interior. La caverna paleolítica riosellana se cerró de forma provisional el pasado domingo y hasta nuevo aviso por los problemas de accesibilidad generados por las lluvias. Desde entonces permanece cerrada, ya que el martes y el miércoles las lluvias fueron torrenciales.
El Centro de Arte Rupestre anunciaba ayer que las visitas a la cueva se volverán a realizar a partir del próximo miércoles, manteniéndose abiertas hasta el domingo 3 de noviembre, último día de apertura de la temporada 2019. Se recomienda a los visitantes que acudan con calzado adecuado.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Estos son los mejores colegios de Valladolid
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.