La condena de La Golosina: 18 años de cárcel por acabar con la vida de Denisa

Rocío Martínez Santamaría -nombre real de la encausada- se encontraba en una hamburguesería junto a su novio el 25 de noviembre de 2018 en la localidad madrileña de Alcorcón. En la pantalla del móvil del joven apareció una solicitud de seguimiento en instagram. La enviaba una joven de 17 años que había sido su pareja meses atrás. La Golosina ardió en ira y «exigió» a Mario que le llevara al lugar en el que se encontraba la menor.

Llegaron en coche entre las 21:30 y las 22:00. La Golosina se bajó del vehículo y avanzó bajo la lluvia hasta el local donde se encontraba, hablando por teléfono con una amiga y ajena al monumental enfado, la adolescente. Llamó a la puerta y, cuando la víctima le abrió, le asestó una puñalada en el abdomen «sin que Denisa, que llevaba un teléfono en una de las manos, pudiera hacer nada para defenderse«, según recoge la sentencia.

«Rocío, no me hagas nada», se escuchó desde el otro lado del móvil. «Tía, me han pinchado, ven», rogó a su amiga. Su vida se apagó rumbo al hospital y, de este modo, La Golosina cumplió con las amenazas que llevaba meses lanzando a la que había sido novia de su pareja y de la que tenía celos.

En una ocasión le escribió: «Te voy a romper la cabeza por todo lo que me has llamado a mí sin conocerme, vale. Tú me has llamado yonqui, me has llamado come bolsas, tú a mí me has llamado de todo. A mí, una rumana de mierda, una puta roba cable de mierda, no me va a llamar todo eso, no me lo ha llamado mi madre y no me sale del coño. Entonces, por esto, independientemente de que tú estás con Mario o no, voy a ir y te voy a matar Denisa, y te voy a matar y ya está».

Solo dos meses antes del crimen reiteró sus intenciones: «Me he quedado embarazada y lo voy a tener, porque no soy una sucia como tú, y te juro por mi hija, porque va a ser una niña, que te voy a quitar la vida, que todo lo mal que me lo has hecho pasar tú, ya he ido una vez a rajarte entera y no ha salido. La próxima tranquila, que no te voy a amenazar ni a avisarte».

Los jueces la han condenado a 17 años de cárcel por el delito de asesinato con la atenuante de confesión tardía y a un año y medio más por las amenazas frente a los 26 que reclamaba la Fiscalía. El tribunal no aprecia las atenuantes de alteración psíquica, drogadicción, obcecación ni dilaciones indebidas solicitadas por la defensa y tampoco la existencia de un delito de integridad moral, como pedía la acusación.

La Golosina, hija de un Guardia Civil, deberá indemnizar con 150.000 euros a la madre y al padre de Denisa, y con 100.000 euros a su hermano. Durante el juicio, le joven defendió que fue su novio quien le entregó la navaja abierta antes de salir del coche y quien se deshizo de ella, ayudado por la familia. Él lo rebatió. Según su relato, simplemente le llevó a ver a la víctima porque se puso como «loca» al ver la notificación de la red social.

La sentencia señala que él permaneció en el vehículo y, por tanto, no pudo participar ni ver la agresión por lo que le absuelve. El fallo no es firme por lo que las partes aún pueden interponer un recurso ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.