¿Qué es la dieta keto?¿En qué casos no está recomendada?

El término de dieta keto es la adaptación de 'ketogenic diet', es decir, dieta cetogénica. El nombre hace referencia a un modelo de alimentación cuyo objetivo es la creación de cuerpos cetónicos, lo que provoca la reducción de carbohidratos incluidos en el plan alimenticio. Al reducir estos nutrientes, el cuerpo utiliza las grasas en lugar de los azúcares para generar energía.

Este régimen se basa, por tanto, en el consumo de alimentos con ácidos grasos provenientes, por ejemplo, de huevos, carnes, aguacates, mantequillas, frutos secos, etc. El consumo de proteínas es moderado y el de carbohidratos reducido.

Es una dieta muy usada en determinados ámbitos deportivos y algunos famosos del universo 'hollywoodiense' como Halle Berry, Gwyneth Paltrow o Kim Kardashian la han puesto de moda para adelgazar. Sin embargo, es necesario hacer este régimen con sentido común y consultar con un especialista en nutrición, ya que una reducción drástica y repentina de los glúcidos puede provocar efectos secundarios temporales como estreñimiento, dolor de cabeza o calambres musculares.

Para alcanzar el estado de cetosis en una dieta keto se reducen al máximo los hidratos de carbono simples y complejos. Dependiendo de cada persona, su condición física y nivel de ejercicio, se suele establecer el límite máximo de hidratos diarios entre 20-50 g.

Para conseguir obtener las calorías de alimentos grasos y proteínas, las comidas se deben elaborar en torno a los siguientes alimentos:

Entre los alimentos que se reducen o eliminan en este plan alimenticio están:

La dieta keto no está recomendada para personas con enfermedades metabólicas, problemas de tiroides, riñón, hígado o páncreas, personas diabéticas o pacientes con TCA. Asimismo, se desaconseja seguir esta alimentación a largo plazo, ya que es muy desequilibrada. Puesto que no es posible lograr adherencia, no sería una dieta adecuada para mantener el peso, y puede provocar efecto rebote.

Una dieta cetogénica estricta solo debería emplearse con objetivos concretos en circunstancias determinadas. Dependiendo de esos objetivos -adelgazar, perder grasa o definir músculo-, podría adaptarse a las circunstancias específicas de cada individuo.

*Antes de realizar una dieta, lo mejor es ponerse en manos de un profesional para que realice un estudio completo del metabolismo y acompañe al paciente en el proceso.

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