'Bena', de entrenar en juveniles a dirigir cinco partidos en Segunda

La del sábado en el Carlos Tartiere será la tercera vez que Javier Benavides, al que Rozada se refiere con cariño como 'Bena', dirija un partido en Segunda División. Para el técnico asturiano la temporada ha sido una caja de sorpresas.

Primero ascendió al primer equipo con su tocayo y luego tuvo que sustituirle en el banquillo antes de que acabara el año. Lo hizo ante Málaga y Almería, tras la sanción de dos partidos que cumplió Rozada por su expulsión en Santander. Ahora lo hará de nuevo, solo cuatro semanas después, para dirigir al equipo en tres partidos más: ante Alcorcón y Tenerife en el Tartiere, y frente al Lugo la próxima semana.

De su primer periplo salió con un punto de cuatro posibles en un inicio de segunda vuelta complicado en cuanto a calendario. Ahora le toca afrontar tres partidos vitales también, contra rivales directos, pero el entrenador azul tiene la confianza del club y también de Rozada.

«'Bena' es un entrenador que pese a que no ha estado en el fútbol profesional ni en categorías senior, viene de la base, de dirigir juveniles y de hacerlo de manera magnífica, sé que tiene ese plus también desde el banquillo porque es un persona intensa y que transmite», ilustró Rozada.

El ovetense reconoció que tener que ver el partido desde la grada «no es el escenario ideal», pero aclaró que desde su asiento en una de las cabinas del Tartiere seguirá ayudando a su equipo de trabajo, formado por el propio Benavides, el preparador físico Alberto Martínez y el entrenador de porteros, Sergio Segura.

«Me gustaría estar jugando el partido con ellos, que es lo que intento cuando dirijo, pero el grupo está muy responsabilizado ahora, tiene mucha experiencia y tendrán al resto de cuerpo técnico. Desde arriba seguro que también puedo ayudar con todo aquello que ellos no vean», comentó el propio Rozada, que no cree que su ausencia a pie de campo influya en el resultado. El entrenador carbayón se mostró convencido de que gracias a esa comunión entre miembros del cuerpo técnico y la que habrá con los jugadores durante el partido los tres puntos se quedarán en el Carlos Tartiere.