«Toda Asturias estará mañana con el Avilés»

Ayer, el entrenador del Avilés, nos lo puso fácil para buscar el mejor titular: «Creo que el domingo, nosotros en general, la ciudad en general, seremos el equipo de Asturias. Vamos a tener a toda la afición de Asturias con nosotros, la de Oviedo, la de Gijón, y la de todos los concejos, porque el domingo somos el equipo de Asturias». Eso supone un estímulo más que una carga: «Tenemos responsabilidad más que presión y el equipo está en la forma más óptima posible para afrontar esta eliminatoria. Trabajamos todo el año para esto y si nos podemos representar con muchísima gente creo que somos unos privilegiados. Creo que todas esas personas se cambiarían por nosotros, por estar ahí en el césped y tener la posibilidad de dar una alegría a mucha gente».

El Avilés tiene la ventaja de dos resultados, victoria y empate, para subir y parece favorito, pero el rival no viene de paseo: «Sabemos que van a ser 90 minutos, que va a ser un partido largo y tenso. El Granada es un muy bien equipo y nosotros siempre salimos con la idea de representarnos bien desde el minuto uno, pero hay un rival que juega y un rival que tiene sus virtudes. Nuestra mentalización es salir desde el minuto uno a tener el control del partido, pero sabemos que en un 'play off' con dos equipos muy buenos, que llegan al final entre cien equipos de toda España, siempre va a haber momentos complicados y esperamos solventarlos de la mejor manera posible»

Se le pregunta por su plan y las posibles variantes respecto a la ida en Granada: «Los cambios van en función de las situaciones cambiantes que tenga el juego. Nosotros queremos ser el equipo que fuimos todo el año, mantener la filosofía y el estilo de juego que nos trajo hasta aquí, y a partir de ahí habrá situaciones en el partido en las que tendremos que adaptarnos. Entonces tendremos que estar acertados, al igual que los futbolistas, para esas situaciones cambiantes».

En estos partidos poca motivación extra se puede dar a los futbolistas: «Poco les podemos decir ya, los grandes protagonistas, son ellos los que van a tener que jugar y los que van a tener que adaptarse. Es un orgullo y un aliento que tengas casi 7.000 personas apoyándote. Si en julio cuando empezamos a entrenar tuviésemos que elegir una situación, sería esta, seguro».

Cañedo admite que este puede ser su partido más importante como entrenador, pero lo lleva bien, al menos en apariencia: «Yo estoy con la ansiedad y los nervios controlados, pero tensionado porque daos cuenta de que tenemos una responsabilidad, una oportunidad histórica de meter este club en una categoría como la Primera RFEF, el primer equipo asturiano que puede entrar en ella, y evidentemente eso te responsabilizas».

El entrenador ovetense entiende que «el tipo de partido que nos conviene es uno en el que nosotros seamos protagonistas».

La presencia de Samu, como ya dijo en la previa de la ida, no le obsesiona: «Al final no nos centramos solo el Samu, nosotros creemos que el Recreativo Granada es un equipo muy complicado y con muchísima calidad, muchísimos recursos. Tiene pie, fuerza física en ese tipo de futbolistas, una dirección técnica muy buena. Va a ser un equipo muy complicado en todos los sentidos, no podemos solo centrarnos en un futbolista porque al final son once muy buenos, y con como se vio en la ida, tienen armas dentro del once inicial y tienen armas fuera, con lo cual nosotros tenemos que tratar de cuidar todos los detalles pero no centrarnos en ninguna particularidad».

La experiencia juega del lado avilesino, aunque Cañedo también tiene chavales en su plantilla y en su once: «Tenemos un equipo relativamente joven también. Si excluimos a Morcillo y a Natalio, que nos rompen la media, somos un equipo joven. Evidentemente ese tipo de experiencia que tienen ellos dos o algún otro futbolista lo compensan, son los que más ilusión tienen de esta eliminatoria. El oficio es importante en cualquier profesión y la capacidad de adaptación a una situación como la que va habrá de aquí al domingo, también».

Cañedo se lanza en una última y voluntaria reflexión: «Me gustaría mandar a la gente un mensaje de agradecimiento, el estadio va a estar lleno. Como os dije antes creo que mañana vamos a ser el equipo de Asturias, y tirando un poco de retórica porque luego siempre me decís que soy un triste, me gustaría que el domingo los aficionados nos lleven en volandas y que representemos todos un poco los valores que muchas veces cantamos en las canciones que siempre nos representan en momentos de alegría, que nos representemos ahí verticales, inquebrantables y sobre roca firme, que cantemos el Asturias y que estemos todos unidos».