PSOE, Podemos e IU reformarán el reglamento de la Junta para permitir el uso del asturiano

La propia presidenta de la Mesa de la Comisión, la socialista Lidia Fernández, fue la que instó a la titular de Cultura a dirigirse en castellano a los diputados tras consultar con los servicios jurídicos de la Cámara los requerimientos formulados por parte de PP y Vox, que llegaron a pedir el servicio de un intérprete para poder «entender» la comparecencia. La polémica en torno a estos hechos tuvo continuidad ayer en la junta de portavoces, donde IU y Podemos ya dieron a conocer sus propias propuestas de reforma del reglamento para evitar que se repita esta situación.

La portavoz del PSOE, Dolores Carcedo, lamentó que la «flexibilidad» con la que hasta ahora se habían interpretado las normas de la Cámara se hubiera traducido, con la «introducción» de Vox, «en rigidez» por parte de grupos parlamentarios que, hasta ahora, habían permitido el uso del asturiano en la Junta con normalidad, en referencia al PP. El PSOE se mostró dispuesto a abordar la oportuna reforma del artículo 11 del reglamento y pidió tratar este debate de forma «serena» y no «sobreactuada».

La diputada de Podemos Lorena Gil entiende que situaciones «esperpénticas» como la vivida el martes en la Junta son consecuencia de la ausencia de cooficialidad y se mostró también partidaria de reformar el reglamento para que se pueda hacer un uso «extensivo» del asturiano. Por su parte, Ángela Vallina, de IU, calificó lo ocurrido de «espectáculo bochornoso» y lamentó que el reglamento actual de la propia institución a la que le corresponde «proteger y promover» el asturiano pueda «coartar la libertad» de cualquier persona a utilizarlo, un derecho que ahora solo se contempla para los diputados. No obstante, según informó la diputada de la formación morada, Lorena Gil, desde los servicios jurídicos de la Cámara se quiso matizar ayer que la decisión final de impedir a Berta Piñán expresarse en asturiano fue de la Mesa de la comisión.

Con argumentos enfrentados se posicionan las formaciones del centro derecha. Desde Ciudadanos, Laura Pérez Macho tildó de «teatro» y estrategia «electoralista» por parte del Gobierno regional lo ocurrido en la intervención de la consejera de Cultura, y reprochó que el presidente del Principado, Adrián Barbón, utilizara las redes sociales para caldear aún más el ambiente asegurando que Piñán había sido «humillada». La portavoz de la formación naranja considera que si un solo diputado «no se siente cómodo» escuchando la comparecencia en asturiano tiene derecho a solicitar que los asistentes se dirijan a la Cámara en castellano, como idioma oficial. «No entendemos la puesta en escena del Gobierno asturiano con este asunto, parece una cortina de humo ante los problemas realmente importantes», reprochó.

Una postura similar a la que mantiene Vox, que defendió el derecho que tiene cualquier ciudadano asturiano a ser atendido en castellano. «Si nos podemos entender todos en el mismo idioma nadie comprendería que tengamos que utilizar intérpretes, es el colmo de los absurdos, cuando luego nos vamos a tomar un café y todos hablamos en castellano», reprochó.

En el medio del debate se mantiene Foro, que considera que se trata de una «discusión estéril» en la que su formación no quiere participar y afeó a las fuerzas que están utilizando la llingua como «arma arrojadiza».