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La humedad propia del clima asturiano hace que todos los residentes del Principado se hayan tenido que enfrentar, en alguna ocasión, a las lunas del coche empañadas. Se trata de un pequeño detalle muy molesto que aumenta en el otoño e invierno e impide una circulación segura.
Los cristales del coche se empañan por el contraste entre la temperatura del interior y del exterior del vehículo. Como resultado de esto, la humedad del ambiente se acumula en todos los cristales del turismo, incluyendo ventanillas.
1. Activar la calefacción
Aunque hay muchas formas de desempañar los cristales del coche, no todas son igual de efectivas. El primer consejo es también el más popular y consiste en encender el aire caliente utilizando los sistemas de ventilación preparados para ello. Si el cristal que tratamos de desempañar es el frontal, podemos utilizar la opción que centra el aire en el cristal delantero para acelerar el proceso. Muchos vehículos disponen también de un botón específico para desempañar el cristal trasero.
2. Poner después el aire acondicionado
Pocos saben que lo más recomendable es combinar al aire caliente con el frío. Una vez hayamos visto que los resultados del aire caliente dan sus frutos, puede activarse el aire acondicionado que terminará de secar los cristales.
3. Limpieza
Que el cristal esté limpio es fundamental para que se desempañe rápido, ya que las motas de polvo pueden favorecer la condensación del aire.
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4. Sistema de recirculación
Es importante desactivar el sistema de recirculación del vehículo, ya que lo que interesa cuando los cristales se empañan es sustituir el aire del interior del vehículo por otro acorde con la temperatura exterior y no poner en circulación el aire que ya está dentro del coche. Por este motivo, es recomendable desactivar esta opción y que el sistema de aire acondicionado introduzca aire nuevo.
5. Productos antivaho
Como última opción —bien como precaución o como medida desesperada si el resto de consejos fallan—, puede utilizarse algún producto antivaho. Estos son muy útiles en zonas que, como Asturias, tienen un clima muy húmedo.
Hay alternativas 'lowcost' que ofrecen resultados similares a estos productos antivaho. Utilizar por ejemplo una patata cortada a la mitad puede ayudar a que el almidón de este alimento dé al cristal un efecto impermeable. Debe primero frotarse la luna con la mitad de una patata para después aclarar los restos con un paño húmedo.
La espuma de afeitar y algunos tipos de champú también pueden aplicarse sobre los cristales, logrando un efecto similar a los productos especializados. Otra alternativa puede ser dejar en el vehículo un calcetín con arena de gato, ya que esta absorbe la humedad.
Bajo ningún concepto debe tratar de limpiarse el cristal una vez empañado con un trapo o tela. Muchos conductores cometen este error y solamente logran embadurnar la luna y dificultar aún más la visibilidad.
Para evitar que los cristales vuelvan a empañarse lo ideal es mantener el interior del coche a unos 18 o 19 grados. Es importante también no circular con las ventanas bajadas.
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