Hosteleros y federación vecinal respaldan el anteproyecto para la reforma del Muro

Otea analizará en profundidad el proyecto cuando le sea explicado por los ediles de Movilidad y de Obras Públicas, pero Lorenzo mostró su esperanza de que «tengan en cuenta cómo acceder el tráfico rodado de servicios para la numerosa hostelería que existe en la zona del Tostaderu y cómo recuperar el número tan alto de plazas de estacionamiento que se van a perder».

La Cámara de Comercio de Gijón comparte la ampliación de espacio para peatones, aceras más anchas para el desarrollo de la hostelería y el comercio, zonas de esparcimiento complementarias y otras formas de movilidad, pero añade que, «a la vez, entendemos que debe mantenerse, y cabe perfectamente, el tráfico de vehículos a motor en doble sentido», indicó su presidente, Félix Baragaño. La entidad tiene claro que «es urgente terminar con la situación de provisionalidad en la que se encuentra el paseo del Muro desde hace dos años», pero apunta que las actuaciones que se vayan a desarrollar en ese ámbito han de hacerse «con un criterio de prudencia teniendo en consideración la reciente sentencia sobre esta materia», ya que remarca que «no sería deseable que los fondos públicos se inviertan en unas obras que posteriormente haya que revertir».

Especialmente molestos están en la Unión de Comerciantes, habida cuenta que las autoridades municipales apenas ha contado con este sector para desarrollar este proyecto, al igual que ocurrió con el Plan de Movilidad. «Defendemos el doble sentido en el Muro o que se habilite en función de las necesidad de la ciudad», explicó su gerente, Carmen Moreno. La entidad esperará a que pase Semana Santa para que les informen con detalle desde el Ayuntamiento. Si pasado un margen prudencial no se produce ese encuentro, «hablaremos de las formas y no del plan», apuntó.

El presidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos (FAV), Manuel Cañete, destacó que algunas de las medidas del proyecto forman parte del decálogo consensuado en la Comisión del Muro. Según lo que se conoce hasta el momento, indicó que «deberíamos hacer un esfuerzo en crear espacios verdes de estancia, de socialización, y no solo un paseo verde de tránsito. Falta algún espacio infantil, precisamente en el barrio que más carencias tiene». Y, vaticina, se atisba alguna propuesta de terrazas que tendrá controversias». La FAV pide que se alcance un consenso sobre este proyecto y el próximo lunes se reunirán sus directivos para analizar detalladamente la propuesta presentada.

Miguel Llanos es el presidente de la federación vecinal de la zona rural Les Caseríes y aseguró que en el colectivo «seguimos manteniendo la misma postura: el doble sentido en el Muro. Si no, que nos den salidas alternativas». Llanos critica que no se concreten las medidas que se van a implantar ni se les haya convocado para informarles.

De «huida hacia adelante» calificó el anteproyecto Montse Medina, representante de Stop Muro. Además, advierte de la reciente sentencia que obliga a restablecer el doble sentido del tráfico y se mostró convencida de que, «si recurren al TSJA, la Justicia hablará». «Es un tira p'alante que libres. Ya veremos si libran o no», indicó Medina, quien calificó el proyecto como «un cúmulo de disparates». En su opinión, se ha de tener en cuenta «a la gente que va a trabajar, no solo a los que pasean. ¿En qué mundo vivimos?», se pregunta. Por otro lado, duda de que antes de fin de año comiencen las obras, como anunció el Ayuntamiento, porque «tienen que cumplir unos plazos legales y se presentarán bastantes alegaciones».