Los sindicatos advierten de movilizaciones si no se soluciona el problema industrial asturiano

El líder de UGT en Asturias centró el foco en dos cuestiones: el problema del coste energético para la industria electrointensiva, «que representa el 12% del PIB asturiano», y la ausencia de alternativas al cierre de las térmicas. «Con cada decisión que toma el Gobierno central en materia de industria, Asturias se muere», afirmó Fernández Lanero.

La problemática a la que se refieren los dos sindicatos no es nueva y lleva siendo objeto de debate y reivindicación durante varios años. El estatuto de las industrias electrointensivas, que debía dar solución a los problemas del coste eléctrico, no satisfizo, ni de lejos, las aspiraciones asturianas. El propio Gobierno regional presentó alegaciones a un texto que apenas tiene impacto sobre los costes por este suministro que afronta el sector en la región, alegaciones que fueron desatendidas. Tampoco en el caso de los proyectos que deben sustituir las térmicas cerradas en Lada y Soto de la Barca hay avances. El propio consejero de Industria reconoció esta semana en la Junta que hay «dificultades» para encontrar un proyecto singular para cada emplazamiento que pueda suplir en términos de empleo y actividad económica el cierre de las instalaciones, y que se trabaja en un conjunto de iniciativas de menor tamaño que, en conjunto, puedan cumplir el objetivo.

En el caso de los costes eléctrico, la Alianza por la Industria firmó un documento que recoge la necesidad de que se eleven al máximo las compensaciones por costes indirectos de CO2 desvinculándolas de la disponibilidad presupuestaria, que se equiparen las ventajas de acceso a una electricidad más barata a la industria asturiana en el nivel de sus competidores europeos, que se establezca un mecanismo de sustitución a las subastas de interrumpibilidad y que se ponga en marcha una interlocución directa a nivel ministerial con las grandes empresas asturianas. Unas reivindicaciones ya trasladadas a Madrid pero que, no obstante, ya fueron desatendidas por el Ejecutivo central en el periodo de alegaciones del estatuto. «La industria asturiana se la juega», señaló José Manuel Zapico, quien apremió al Gobierno a aportar soluciones y se sumó a la intención de salir a la calle en defensa de la industria si estas no llegan.

El presidente del Gobierno afeó esta mañana a «algunos grupos de la oposición» su actitud en el pleno monográfico para abordar los problemas de la industria celebrado esta semana en la Junta, al entender que se vio en la Cámara «mucha protesta pero poca propuesta». «Algunos se dedicaron a buscar titulares sin aportar propuestas concretas», recriminó. El líder socialista insistió en que la hoja de ruta del Principado es «anticiparse» al colapso del sistema industrial asturiano como consecuencia del proceso de descarbonización fijado por la UE y utilizar los fondos europeos para «actualizar a la industria asturiana a este futuro que ya llega».

En este sentido, y preguntado por si va a trasladar personalmente las resoluciones en materia de industria acordadas esta semana en la Junta a Pedro Sánchez, Barbón respondió que no se trata de «buscar una foto con el presidente», sino de trabajar «de verdad, en serio y de forma coordinada» tanto con el Ministerio de Industria como el de Transición Ecológica. Quiso dejar claro también que el Gobierno asturiano viene trasladando las reivindicaciones en materia de industria de esta región desde hace tiempo tanto al Ejecutivo central como al PSOE nacional «públicamente y de forma privada». De hecho, está convencido de que, a estas alturas de legislatura, ya «nadie cuestiona que alzamos la voz» ante el Gobierno central tanto en materia de industria como en otras cuestiones.