¿Qué hacer si el cajero se queda con el dinero o con tu tarjeta?

El enunciado de la ley de Murphy proclama que, si algo puede salir mal, saldrá mal. Por eso, aunque no es habitual que un cajero se quede con tu tarjeta o se niegue a facilitarte el dinero que has tecleado, a veces ocurre y el día en que suceda será, probablemente, el que más prisa tengas o más lo necesites. Por eso, saber cómo actuar antes de enfrentarse a un escenario de apremio es importante.

Las causas pueden ser muchas. Desde un fallo operativo del cajero, a la falta de billetes o el 'cash trapping', una original forma de robar. Los ladrones bloquean el dispensador de efectivo con un dispositivo que impide que salga el dinero. Cuando el usuario desiste y se va, lo retiran junto a su botín.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ofrece varias pautas para actuar en caso de que el dinero no aparezca o la tarjeta desaparezca. En el primero de los supuestos, invita a:

- Revisar que no esté bloqueada la ranura de salida de efectivo del cajero.

- Si la incidencia se produce en horario de oficina y la sucursal está abierta, informar cuanto antes del problema a los empleados.

- Si está cerrada, no se puede partir sin el dinero sin más. Antes hay que llamar al número de teléfono de asistencia para incidencias que debe figurar en el cajero y reclamar una solución. Es preciso solicitar el número de incidencia para posteriores contacto

- En caso de que el banco del cliente sea distinto a la entidad propietaria del cajero, se debe informar a ambos

- Hacer fotos y, si es posible, anotar los datos del cajero, así como la hora en que realizó la operación.

- Si el cajero ha emitido un recibo de la operación, guardarlo o hacerle una foto si solo sale en pantalla.

- Comprobar los cargos y abonos en la cuenta corriente y reclamar, si es preciso.

- Bloquear la tarjeta afectada, llamando al número de teléfono correspondiente. Normalmente, también es posible también bloquear las tarjetas de manera temporal a través de las aplicaciones móviles.

- En estos casos, lo normal es que se trate de un problema técnico o que la tarjeta esté caducada o bloqueada por algún motivo, como por ejemplo introducir mal varias veces el pin.

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