El temporal deja otro reguero de argayos

A La Nueva, en Langreo, se desplazó la consejera de Presidencia, Rita Camblor, después de que la escombrera que soportaba la carretera LA-7 cediese y se hundiese la calzada. En la zona se están acometiendo tareas de limpieza y continúa evaluándose el terreno para abrir un acceso, al menos peatonal, para las zonas más afectadas de Pampiedra y La Nueva. A Camblor la acompañaba Carmen Arbesú, la alcaldesa langreana, quien dijo que se han realizado varios vuelos con drones y helicópteros para tener una visión global del alcance de los daños. «La escombrera está expulsando mucha agua, lo que confirma que se está estabilizando».

En Lena, todas las miradas están puestas en La Cortina ante la aparición de una grieta en la zona del argayo que en 2018 sepultó varias edificaciones. La zona ha sido acordonada.

Por su parte, el Ayuntamiento de Siero trabaja a marchas forzadas para reparar un argayo en una de las vías de acceso a La Cabaña, en Lieres. El corrimiento de tierras se produjo, de manera controlada, después de que los vecinos advirtiesen de que las intensas lluvias habían originado un agujero de grandes dimensiones en ella. Se trata de la primera obra con carácter de emergencia a la que se enfrenta el Consistorio este año y se espera esté finalizada la semana que viene.

Los técnicos, en cambio, no pudieron intervenir en Candamo. En concreto, en la AS-353, en la que se hundió la calzada y está cortada al tráfico, Ayer se cayó otro tramo que estaba suspendido en el aire y los operarios están pendientes de que baje el nivel del cauce del río, próximo.

En el oriente, en Peñamellera Baja, persisten las inundaciones en las vegas que rodean Panes, donde en la noche del jueves fue necesario evacuar garajes. «No hay precedentes de tres desbordamientos en diez días», afirmó el alcalde, el alcalde José Manuel Fernández. En Llanes, el Ayuntamiento habilitó la salida por carretera de Frieras por San Antolín, tras cerrarla el jueves «por precaución». El peligro de los ríos tiende a remitir, aunque el Narcea y el Nalón son algunos de los que están en nivel de 'seguimiento'. No se esperan fenómenos para el fin de semana, con predominio de nubes, según la Aemet, que dio a conocer ayer el balance de noviembre, «muy húmedo». La estación Benia de Onís, con 547 litros por metro cuadrado, registró récord. En su caso, fue el noviembre más lluvioso desde 1971.