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Centenares de personas se han dado cita en el Ayuntamiento de Llanes para celebrar una concentración silenciosa en memoria de Javier Ardines, el concejal de Izquierda Unida asesinado la semana pasada cerca de su casa.
En la convocatoria se ha leído un manifiesto elaborado por la agrupación de IU Llanes ... , «atendiendo a la difícil y dolorosa situación que viven tanto sus compañeros y compañeras de partido, amistades y, muy especialmente, su familia». Unas bonitas palabras que se ha encargado de transmitir el excordinador de IU en Asturias Manuel González Orviz.
«Desde aquí, en este lugar que hubiera preferido no tener que ocupar jamás, hago un llamamiento para el pronto esclarecimiento de este crimen y pido a todos y cada uno de quienes me escucháis que mantengáis la calma y la prudencia. Hagámoslo por la memoria de Javi Ardines y por su familia. Especular no lleva a nada, salvo a sumar más dolor al dolor».
En sus palabras han recordado la trayectoria tanto personal como laboral de Ardines, una personas «íntegra, honesta y con muchos valores que siempre defendió el respeto a los demás». Por eso, desde su municipio han pedido que «se haga justicia y que los culpables de su muerte tengan un castigo ejemplar».
Tras la lectura del manifiesto se guardó un riguroso minuto de silencio que dio paso al momento más conmovedor. La cantante Marta Elola interpretó junto con Douglas Anderson a la guitarra la canción 'Gallo rojo, gallo negro' en el balcón del consistorio que hizo que muchos fuesen incapaces de reprimir las lágrimas.
Además de familiares, allegados y miembros de la corporación municipal llanisca, muchos otros representantes políticos de la región acudieron a despedir a su compañero. Entre ellos, Gaspar Llamazares, Adrián Barbón, Ramón Argüelles, Paula Valero, Aurelio Martín, Gimena Llamedo, Jesús Bordás, José Manuel Fernández, Charo Fernández Román junto a otros ediles de Ribadesella o Emilio García Longo.
El cuerpo sin vida del edil fue encontrado el jueves por un vecino de la zona rural en la que residía. en Belmonte de Pría La autopsia reveló lo que nadie quería, que su muerte fue violenta. El cadáver apareció a unos metros de su furgoneta, con el motor encendido, en un tramo en el que unas vallas obstaculizaban el camino. La Guardia Civil está investigando lo ocurrido e interrogando a buena parte de su entorno para descubir al o a los culpables de su asesinato, que ha conmocionado no solo al municipio de Llanes sino a toda la región.
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