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Teresa Mallada comunicó ayer ante los medios de comunicación, en una comparecencia breve y sin opción a preguntas, su decisión de «dar un paso a un lado» y renunciar a presentarse al próximo congreso autonómico del PP, aun sin convocar, en el que tenía ... intención de renovar su liderazgo como presidenta y como candidata.
Acata así la decisión de Génova de renovar el liderazgo del partido en Asturias en aras de favorecer la unidad y buscar al mejor candidato posible que, si bien se le había comunicado ya hace meses, el pasado lunes le fue transmitida sin posibilidad ya a réplica por el presidente nacional, Alberto Núñez Feijóo. «Creo que en este momento es lo más adecuado para nuestro proyecto del PP en Asturias», declaró. «Siempre he formado parte de las soluciones y nunca de los problemas, y siempre he contribuido a que el PP saliera adelante, intentando que se dejaran de lado los intereses personales», añadió.
Mallada leyó un escueto comunicado en la sede del partido arropada por los diputados Reyes Hurlé, Pablo Álvarez-Pire y Javier Brea, además de por el expresidente del partido, Isidro Fernández Rozada y el presidente del Comité de Derechos y Garantías del partido, Juan José Fernández. Se echó en falta, de quien fuera en todo momento su núcleo duro, a la también diputada Beatriz Polledo, a quien, según aclaró más tarde, le hubiera gustado estar presente pero no pudo por cuestiones de agenda.
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La expectación en la sede del partido era máxima dado que, hasta la fecha, Mallada se había enrocado en su postura de mantenerse al frente del partido y presentarse al próximo congreso, en un claro pulso al equipo de Alberto Núñez Feijóo. Lo hizo hasta el punto de que en Génova se plantearon incluso la posibilidad de intervenir el partido o, como poco, posponer el congreso para evitar una confrontación interna a solo unos meses de las próximas elecciones. Mallada dio un giro a su posición inicial y dijo echarse a un lado, desactivando cualquier tipo de intervención por parte de la dirección nacional, aunque su renuncia a presentarse al congreso ha sabido a poco en determinados sectores, que esperaban su dimisión. De hecho, que ella continúe al frente del partido hasta la celebración del congreso -previsiblemente en noviembre- genera recelos y dudas sobre las verdaderas intenciones de su equipo. Hoy, en Ribadesella, ha convocado a afiliados y dirigentes del partido para informar sobre lo ocurrido.
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Mallada aprovechó la comparecencia pública para hacer repaso a su trayectoria política, «desempeñando aquellas responsabilidades que los afiliados y los responsables de mi partido han querido que tuviera». Anotó que su llegada a la Presidencia del partido hace dos años fue ratificada «por unanimidad por los 200 afiliados que forman parte de la Junta Directiva Autonómica», y destacó el «trabajo riguroso» que se viene haciendo en el grupo parlamentario que ella preside. Tras esta defensa inicial a su labor al frente del partido y reconocimiento público al trabajo de todo su equipo, Mallada entró de lleno al motivo de la convocatoria. «Nos encontramos en un momento crucial para Asturias», dijo, y «siempre he colaborado en las soluciones y en buscar en cada momento lo mejor para mi partido», abundó antes de comunicar su decisión de no presentarse al próximo congreso autonómico.
Mallada aseguró haber adoptado tal decisión tras analizar la situación con Alberto Núñez Feijóo «en unos contactos en los que hemos acordado buscar conjuntamente la mejor solución para el futuro de nuestro partido», e insistió en que «es algo que asumo porque siempre he antepuesto los intereses generales a los míos y mis intereses son los mismos de siempre: contribuir desde el lugar que quieran que ocupe los afiliados del partido y la dirección nacional a mejorar la vida de los asturianos».
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Concluyó su alegato, que fue aplaudido por los diputados que le escuchaban desde la primera fila de la sala de prensa, y los trabajadores del partido que aguardaban al fondo de la habitación, insistiendo en que «mi compromiso con los asturianos y con mi partido es el mismo que he tenido desde los 18 años: seguir trabajando al lado de mis compañeros con la misma ilusión y entrega de siempre para que nuestro partido gobierne en Asturias y para que Alberto Núñez Feijoo sea el próximo presidente de España». «Ese es mi compromiso porque creo que es lo mejor para Asturias y lo mejor para España», concluyó la todavía presidenta de los populares para despedirse con un «a seguir trabajando».
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