«Una persona cuidaba de mi tía 24 horas al día», dice la mujer de Luis Lorenzo

La pareja, que se presentó en los juzgados acompañada de su hijo, insistió en su inocencia. La sobrina de la fallecida aseguró que «tengo la conciencia absolutamente tranquila, confío plenamente en la justicia y mi única intención es prestar la máxima colaboración para esclarecer esta situación cuanto antes». Además, argumentó que «una persona cuidaba de mi tía 24 horas al día por si ocurría algo», como prueba de su preocupación por María Isabel, la octogenaria que falleció en Madrid mientras estaba al cuidado de la pareja.

«Tanto mi mujer como yo somos completamente inocentes», señaló por su parte Luis Lorenzo. «Confiamos plenamente en el trabajo que está haciendo la Justicia y pido respeto por un derecho constitucional, el de la presunción de inocencia».

«Si la prueba está bien hecha, el resto decae; aquí lo importante es el dictamen pericial, lo demás no es relevante». Así se manifestaba ayer, en declaraciones a EL COMERCIO, Francisco Pérez Platas, abogado de Luis Lorenzo y Arantxa Palomino, nada más saber que se acababa de levantar el secreto del sumario. A partir de ahí, los abogados recibirán el informe del procurador (ninguno de los dos letrados, ambos asturianos, lo tenía ayer en su poder aún) y comenzarán a analizar los datos.

En el mismo sentido se pronunció la defensa de la familia, ejercida por Pedro Martín Pastor, que ayer se reunía con su cliente, José María Suárez, hermano de la fallecida, para comenzar a preparar las actuaciones.

Los resultados de la autopsia solicitada por José María Suárez determinarán las causas reales del fallecimiento de la asturiana, tía de los acusados. «La conclusión final no la conocemos, con lo cual hay que esperar, porque se han filtrado datos y hacen daño y contribuyen a confundir», aseguró Martín.

Por su parte, Francisco Pérez indicaba que una de las incógnitas aún por desvelar es si existe una autopsia o dos. «Posiblemente se haya barajado que el primer certificado, en el que se determinaba el fallecimiento por causas naturales, era una autopsia. En cuanto tengamos acceso, procederemos».

Sobre el posible envenenamiento del que se está hablando públicamente desde que estallara el caso, el letrado matizó que «la presencia de metales puede deberse a varias causas, una de ellas la ingesta de algún pescado, con altos niveles de mercurio, pero es una simple hipótesis, que apunté ante las preguntas que me hicieron; también se puede achacar a ambientes con contaminación alta. Las posibilidades son muchas y, de momento, lo único que hay al respecto son simples especulaciones». En este punto, el letrado quiso remarcar que aunque se están filtrando posibles discusiones en el domicilio de la pareja, grabadas por vecinos, «lo que cuenta es lo que consta en el informe y los resultados que se desprendan de la autopsia».