El Principado duplicará la distancia de seguridad de los pueblos y dará más autoridad a la guardería contra los incendios

Barbón anunció en Valdés que se modificará la ley para duplicar la distancia de seguridad establecida en la actualidad entre pueblos y masas forestales, ahora fijada en 75 metros, hasta los 150 metros, y que se reforzarán las medidas para garantizar su cumplimiento. «Hay que dimensionar el problema donde está, y está en salvar vidas», argumentó.

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Se trata de una de las medidas anunciadas por el presidente del Principado, pero no la única. También comentó que la entrada en vigor de la ley de empleo público permitirá modificar la antigua guardería, que pasará a denominarse cuerpo de agentes medioambientales, y avanzó que la intención del Gobierno regional es reforzar su autoridad hasta identificarlos «como lo que son, policía judicial genérico». Igualmente, incidió en que se está trabajando ya en el «eje de la reconstrucción» de la zona afectada, para lo que está convocada una reunión este lunes del comité técnico que trabaja en la prevención y lucha contra los incendios, en la que tiene previsto asistir el propio presidente dada la «gravedad de la situación». El jueves se reunirá también el consejo forestal porque, explicó, «hemos paralizado nuestro plan forestal, que estaba a punto de salir a información pública» al entender que los hechos sucedidos esta última semana en Asturias deben servir para «sacar lecciones».

El también secretario general de la FSA confirmó que, al margen de las ayudas que se esperan recibir por parte del Gobierno central, con la declaración de zona catastrófica, el Principado ofrecerá ayudas para compensar los daños de los bienes personales y también para la reforestación de las zonas afectadas, «con una política no especulativa». Igualmente, explicó que se tratará de agilizar al máximo la transferencia del fondo específico para la prevención de incendios habilitado en los presupuestos de 2023, que ascendía a 4,5 millones de euros, y que se repartirá entre los ayuntamientos más afectados.

Con respecto a la tramitación de la declaración de zona catastrófica, Barbón calcula que a finales de mes se estará en disposición de realizar la solicitud formal, una vez que se haya hecho un cálculo exacto de las hectáreas afectadas y cuantificado el daño ocasionado. Fue el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, quien cifró de forma «aproximada» en 20.000 las hectáreas afectadas en Asturias por los incendios, una cifra que choca si se tiene en cuenta que el alcalde de Valdés, Óscar Pérez, había fijado en 16.000 las hectáreas quemadas únicamente en su territorio. En todo caso, y a la espera de concretarse la cifra, Bolaños garantizó el apoyo del Gobierno central para la reconstrucción de los terrenos afectados y para recuperar «cuanto antes» la normalidad alterada por «personas desalmadas que merecen que recaiga en ellas todo el peso de la ley». «La voluntad del Gobierno central es hacerlo cuanto antes», incidió el ministro, quien explicó que la tramitación de declaración de zona catastrófica tarda, en otras ocasiones, «una semanas».