Consternación en Soto del Barco tras hallar el cuerpo de su alcalde al pie de un acantilado

Dolor, conmoción, incredulidad... El concejo de Soto del Barco permanece consternado por la muerte del alcalde y jefe del cuerpo de la Policía Local, Jaime Pérez Lorente, cuyo cuerpo fue encontrado este miércoles a mediodía al pie de un acantilado cercano al cabo Vidio, situado en la parroquia de Oviñana, en el concejo de Cudillero. Había desaparecido el día anterior y se le buscaba desde entonces.

La búsqueda del regidor comenzó en la mañana del martes después de que su familia y compañeros de trabajo advirtiesen de su desaparición. Jaime Pérez Lorente fue visto por última vez en torno a las diez de la mañana, cuando acompañó a su mujer en coche a su lugar de trabajo. Después debía dirigirse al Ayuntamiento de Soto, pero nunca lo hizo.

Poco después sus familiares encontraron el teléfono móvil y las llaves en su domicilio, algo que él nunca hacía, y se dio la voz de alarma. En la tarde del martes se localizó su vehículo aparcado frente al faro del cabo Vidio y se inició la búsqueda por tierra, mar y aire. El operativo se tuvo que cerrar sin éxito por las condiciones meteorológicas y de luz, que no permitían sobrevolar la zona.

A primera hora de la mañana de ayer miércoles se retomó el operativo de búsqueda del alcalde de Soto del Barco, en cuanto las primeras luces de la mañana lo permitieron. Los primeros en llegar al lugar fueron sus compañeros de la Policía Local de Soto del Barco. Jaime Pérez Lorente, más conocido como Jimi, formaba parte de la Policía Local desde hace más de tres décadas y en la actualidad era además el jefe del cuerpo, aunque había anunciado su jubilación para dedicarse a tiempo completo a la Alcaldía. También se acercaron hasta el lugar varias patrullas de la policía de Muros de Nalón, concejo vecino de Soto del Barco, y de Cudillero.

A las ocho de la mañana comenzaron a llegar las primeras patrullas de la Guardia Civil, que inspeccionaron desde lo alto los acantilados del cabo Vidio y que tienen unos ochenta metros de altitud en pendiente, dado que la principal hipótesis fue desde el primer momento era que el cuerpo pudiese estar oculto entre las rocas. En el lugar también se congregaron numerosos grupos de personas, familiares y amigos del alcalde que quisieron colaborar en la búsqueda dentro de sus posibilidades. Estuvieron presentes los exalcaldes de Soto del Barco y Muros de Nalón, así como el regidor de Salas.

Durante toda la mañana estuvieron participando en el operativo varios agentes de la policía judicial de la Guardia Civil, que procedieron a abrir el vehículo del alcalde y a analizar todos los enseres que se encontraban en su interior, con el objetivo de hallar alguna pista que pudiese arrojar luz sobre lo sucedido y el motivo de la desaparición del regidor.

A media mañana se puso en servicio el helicóptero medicalizado del 112, que despegó de La Morgal y realizó varias batidas aéreas alrededor del cabo Vidio, prestando especial atención a las zonas más ocultas de los riscos y en las playas bajo los acantilados, aprovechando la bajamar que se registró en torno al mediodía. En el operativo de búsqueda también participaron los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS), que apoyaron desde el agua al helicóptero con una lancha semirrígida.

La noticia que todo el mundo quería que no se produjese pareció confirmarse a mediodía cuando el helicóptero del 112 avistó un cuerpo en el flanco oeste del cabo. Según las instrucciones que le dio el piloto a los rescatadores, el cuerpo estaba oculto entre unas rocas en la base del acantilado, justo fuera del agua. Se trata de una zona de muy difícil acceso junto a la entrada de una cueva conocida como la Iglesiona, una gran oquedad ubicada bajo el mirador del cabo y que es un gran atractivo turístico de la zona cuando las mareas permiten acceder a su interior.

Tras analizar con detenimiento la zona de acantilados, los responsables del operativo de rescate decidieron que fuesen los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) quienes tratasen de llegar al cuerpo con la ayuda del helicóptero, que trianguló la posición del mismo desde el aire para facilitar la maniobra.

Pese la coordinación de los dos equipos, la maniobra de rescate duró más de una hora para intranquilidad y desconsuelo de los familiares, amigos y vecinos, que presenciaron todo el operativo desde la costa. Finalmente los buzos lograron llegar a la zona en cuestión a nado y tras sacar el cuerpo del agua lo trasladaron hasta la lancha en una camilla médica.

Ante la dificultad de llevar el cadáver hasta la costa en el entorno del cabo Vidio, los rescatadores tomaron la decisión trasladarlo en la propia lancha hasta Cudillero, que es el puerto más cercano. Una vez allí se sacó a tierra el cuerpo a la espera de que los forenses certificasen la identidad y la causa del fallecimiento.

Los peores presagios se confirmaron. Fueron los propios familiares del regidor quienes se acercaron al puerto de Cudillero para identificar el cuerpo, que posteriormente fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Asturias, donde se le realizará la autopsia en las próximas horas.

Hoy jueves se instalará la capilla ardiente en el tanatorio de Santa Catalina de Pravia, a partir de las cuatro de la tarde.

El cadáver de Jaime Pérez Lorente será recibido mañana, viernes día 21, a la una de la tarde en la iglesia parroquial de San Juan de la Arena, donde se celebrará el funeral de cuerpo presente y, acto seguido, recibirá cristiana sepultura en el cementerio parroquial de La Corrada, perteneciente al concejo de Soto del Barco.

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