Cómo hacer helados saludables en casa

El verano ya está a la vuelta de la esquina, un momento del año perfecto para disfrutar del sol, del aire libre y también de los helados que gustan tanto a niños como a adultos. Se pueden comprar en supermercados o heladerías y las opciones de sabores son casi infinitas, igual que las texturas y las formas.

Pero también se puede realizar en casa con la ventaja de poder crearlo a tu gusto y además adquirir nuevas habilidades culinarias. No se necesita nada especial: se pueden hacer con ingredientes básicos y una batidora, un robot de cocina o una heladera.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) aporta todas las claves y trucos para poder realizar esta receta y además con alternativas para los celicacos, intolerantes a la lactosa o celiacos.

«El helado hecho en casa permite trabajar con ingredientes de alta calidad, graduar la cantidad de azúcar y evitar alérgenos», aseguran desde la OCU como una de las grandes ventajas de la elaboración casera.

Todos los ingredientes que hacen falta para hacer un helado casero son muy comunes y seguro que ya están en la cocina. Esta es una receta básica pero puede adaptar al gusto, poniendo algo menos de azúcar para que no esté tan dulce, o añadiendo otros aromatizantes, según las preferencias.

Esta preparación sirve como base a la que luego se puede aportar diferentes sabores añadiendo otros ingredientes como frutas, chocolate, frutos secos, etc. Estos son los ingredientes con los que debes contar para hacer helado para 8 personas:

El sabor de esta mezcla variará algo según el aromatizante utilizado. En el caso de los diábeticos habría que sustituir el azúcar por un edulcorante, el mejor es el xilitol (azúcar de abedul) que evita la formación de cristales de hielo.

Los intolerantes a la lactosa solo deben sustituir la leche entera por una sin lactosa y los alérgicos a la proteína de leche simplemente deben cambiar la leche por una bebida vegetal, de almendra, arroz, avena o soja, a su gusto.

Por último, si hay celiacos puede ser tal cual, pero cuidado si se añade chocolate o cacao, algunos pueden llevar trazas de gluten.

Para elaborar un helado de chocolate o de fresa se añanden sobre la base anterior y así se obtienen los diferentes sabores. Estos son algunos ejemplos:

- Helado de café: añadir a la base una cucharada de café soluble.

- Helado de chocolate: añadir 40 g de cacao negro en polvo o 150 g de chocolate.

- Helado de yema tostada: añadir 70 g de azúcar tostado. En este caso, hay que quitar 70 g de azúcar a la mezcla inicial para que no resulte demasiado dulce.

Si se quiere reducir la ingesta de grasa y de azúcar, la alternativa es un sorbete, en vez del helado de base láctea. La base de los sorbetes naturales es el agua que contienen las frutas.

- Para este tipo de helados, se emplea fruta madura que va a aportar el dulzor necesario por lo que es posible no añadir azúcar.

Otra alternativa saludable son los sorbetes de fruta y clara montada. Estos helados son muy fáciles de montar si disponemos de un robot de cocina. Los pasos a realizar son los siguientes:

1. Congela trozos de tu fruta preferida (piña, fresas, mango, etc).

2. Añade en el procesador de alimentos 4 claras de huevo y 300 g de fruta, con la mariposa de montar.

3. En pocos segundos obtendremos una estupenda crema helada.

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