Tengo el colesterol alto: ¿es mejor comer jamón cocido o serrano?

Si algo caracteriza a esta época del año es que solemos hacer más excesos de los habituales. Las comidas copiosas, la falta de ejercicio físico y los numerosos compromisos sociales hacen que nuestra salud se resienta, en ocasiones, más de lo habitual. En el caso de las personas que, además, padecen algún trastorno, como puede ser tener el colesterol alto, resulta especialmente complicado mantenerlo a raya.

Es, por este motivo, que resulta importante conocer cuáles son los alimentos que más nos pueden afectar en este sentido, y una de las principales dudas que planean sobre aquellos que padecen colesterol alto suele ser si es conveniente o no consumir jamón, y cuál es la mejor opción. Y es que, aunque tradicionalmente se viene relacionando el jamón cocido con un alimento más sano que el jamón serrano, lo cierto es que la realidad dista mucho de esta creencia popular.

En lo que se refiere al colesterol, si bien es cierto que el jamón cocido tiene menos grasa que el jamón serrano, en este caso, es más recomendable la segunda opción. Por sus propiedades, se trata de uno de los alimentos que más puede ayudar a las personas a subir el colesterol HDL (también conocido como colesterol bueno), lo que hace que se mantenga la salud cardiovascular.

El motivo de que el jamón serrano sea un alimento más beneficioso, en estos casos, es que su alto contenido en grasa es beneficioso para el organismo, en contra de lo que pudiera parecer. De hecho, el mejor jamón para consumir, en estos casos, es el jamón de bellota cien por cien ibérico, que además de aumentar la concentración plasmática del colesterol bueno es capaz de reducir los niveles del colesterol malo de forma significativa.

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