Las multas que la DGT puede ponerte los días de lluvia

Los días de lluvia las carreteras obligan a los conductores a extremar las precauciones al volante. Además los vehículos en la carretera parecen multiplicarse ya que son muchos ciudadanos que ante las precipitaciones utilizan este medio de transporte en lugar de los habituales como el tren, el autobús o la bicicleta, por lo que el número de coches es mayor y los atascos y retenciones suelen ser habituales.

Conducir bajo estas condiciones climáticas reduce la visibilidad de la calzada, así que tanto para los conductores frecuentes como para los ocasionales es necesario adpotar una serie de medidas para evitar posibles accidentes.

«Evitar las maniobras bruscas, aumentar la distancia de seguridad, reducir reducir la velocidad y llevar los neumáticos en buen estado son los mejores aliados. Junto con sistemas de ayuda a la conducción como el ABS, el ESP o el detector de piso mojado.», advierte la DGT.

No hacerlo puede suponer sanciones económicas, por ejemplo, en el caso de no respetar el espacio necesario con el coche que tenemos delante podemos ser multados con 200 euros y con cuatro puntos en el permiso de circulación.

La iluminación es fundamental para la conducción en los días de lluvia, por lo tanto las luces son un elemento obligatorio y aquellos usuarios que no las utilicen correctamente se enfrentan a multas de hasta 200 euros.

«Se da el caso de que en muchos coches modernos la luz día es tan potente que piensan que llevan los faros encendidos y cuando se hace de noche este despiste les puede costar una sanción», avisa la propia DGT en su portal web

Las escobillas son otro elemento importante para no perder visibilidad a través de nuestro parabrisas, por lo tanto deben estar en buenas condiciones para poder ejercer su función. . Según el artículo 84 del Código de Tráfico y de Seguridad Vial, los agentes pueden inmovilizar el vehículo si presenta «deficiencias que constituyan un riesgo especialmente grave para la seguridad vial». Las sanciones pueden ir de los 80 a los 200 euros.

los neumáticos siempre tienen que estar en buen estado, pero cuando hay lluvia más todavía, ya que la banda de rodadura en buen estado nos permitirá filtrar el agua y conseguir un agarre óptimo en caso de frenada que además se alarga más de lo habitual cuando el suelo está mojado. Según el Anexo VII del Reglamento General de Vehículos del Código de Tráfico y Seguridad Vial, circular con banda de rodadura con menos de 1,6 milímetros de profundidad supone una sanción 200 euros por cada rueda, por lo que la sanción puede ser de 800 euros.

En el artículo 46 aparece una normativa que dice que el conductor debe moderar la velocidad «cuando pueda salpicarse o proyectarse agua, gravilla u otras materias a los demás usuarios de la vía». Si no respetamos esta norma, en los días con precipitaciones se puede mojar a un peatón, aunque la multa no sería por esta consecuencia sino por no adecuar la velocidad a la vía. Supone sanciones de 200 euros.

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