Desescalada | Asturias espera pasar a la fase 3 a partir del lunes 8 de junio

Una fase en la que vuelven a cambiar las normas y, así, por ejemplo, se permitirá el contacto social a personas no vulnerables ni con patologías previas y las restricciones de aforo se suavizarán en tiendas y comercios, donde se permitirá una ocupación del 50%. Y, si en la fase 2 ha sido posible la reapertura de los centros comerciales, en la 3 ya será posible utilizar sus zonas comunes y recreativas. Eso sí: siempre a la mitad de su capacidad.

En bares y restaurantes se podrá ofrecer servicio en la barra, aunque respetando la distancia, y también podrán abrir discotecas y locales de ocio nocturno con un tercio de su aforo.

En el ámbito laboral se iniciarán protocolos de reincorporación presencial en las empresas, aunque con horario escalonado y medidas de conciliación. Y volverán también los toros (con nueve metros cuadrados por asistente) y los espectáculos al aire libre con un máximo de 800 personas sentadas y a dos metros.

Pero, por el momento, Asturias sigue en la fase 2, en la que también hay novedades, porque el Ministerio de Sanidad autorizó ayer la eliminación de las limitaciones para los desplazamientos de los niños y la práctica de actividad física no profesional en los territorios en esta fase.

Así, de acuerdo con la disposición de Sanidad, publicada en BOE, los niños que residan en zonas en fase 2 pueden salir de sus domicilios a cualquier hora sin límite de tiempo ni de veces, con la excepción de las franjas reservadas para los mayores (de 10 a 12 y de 19 a 20 horas).

También quedan eliminadas ya en Asturias las franjas horarias para la actividad deportiva no profesional, que podrá practicarse cuantas veces al día se quiera en el entorno de la comunidad, lo que abre la puerta a la práctica del senderismo.

Ambas autorizaciones se añaden a la orden del 16 de mayo, que establece las condiciones para la flexibilización de varias restricciones de ámbito nacional derivadas del estado de alarma, en aplicación de la fase 2 del plan para la transición hacia una nueva normalidad, pero remiten al capítulo 7 de la orden en vigor, que aún mantiene las mencionadas franjas de protección para los mayores, por lo que se entiende que sería la única limitación.

El Ministerio de Sanidad también ha modificado varios aspectos de esta orden relacionados con el acceso a las playas, de tal modo que los ayuntamientos podrán establecer limitaciones tanto de acceso, que en todo caso será gratuito, como de aforo, a fin de asegurar que se respeta la distancia de, al menos, dos metros entre bañistas. También podrán establecer límites en los tiempos de permanencia, así como en el acceso a los aparcamientos para controlar el aforo, que se calculará teniendo en cuenta que la superficie de playa a ocupar por cada bañista será de cuatro metros cuadrados, eliminando la limitación de que se tenían que reservar seis metros de playa desde la orilla en pleamar. Una limitación, esta última, que podría tener lógica en las playas del Mediterráneo, pero que, en la práctica, inutilizaba para su uso la mayor parte de las pequeñas playas de la costa asturiana, donde los cambios de la marea son mucho más pronunciados. Era esta una reclamación de las comunidades del norte que ha sido tenida en cuenta por el Gobierno central.

Las regiones norteñas pedirán además al Gobierno que, en cuanto sea posible, se permita la movilidad entre comunidades que se encuentran en la misma fase, lo que permitiría crear un corredor en la zona del Cantábrico para favorecer el movimiento en la franja costera «de cara a la segunda quincena de junio», adelantó el presidente del Principado, Adrián Barbón. A partir de ese momento se podría viajar desde Galicia a Navarra, pasando por Asturias, Cantabria y País Vasco, pero evitando la llegada desde zonas que aún tengan mayor incidencia del coronavirus. Sobre todo, Madrid y Cataluña.