«Ningún medicamento cambia la vida al paciente como lo hace éste»

Niños que quieren ser científicos y se dibujan como tal, descubriendo la cura a alguna enfermedad. Pequeños que conocen ya muy bien la importancia de la investigación y la medicina, tras su paso por el hospital. Pacientes que les agradecen haberles cambiado la vida por completo. Eso es parte de lo que se encontraron ayer Svetlana Mojsov, Daniel J. Drucker y Jens Juul Holst en el HUCA. Tres de los cinco premiados con el Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica tenían una cita con una representación de los más de 3.000 alumnos de 41 centros docentes de Asturias que han participado en la actividad de Toma la Palabra relacionada con el trabajo de los cinco científicos, bajo el lema 'La llave de la salud'. Los pequeños no habían tenido una tarea fácil: con la ayuda de sus profesores han estudiado las bases endocrinas de la diabetes y la obesidad, la hormona que regula el apetito, la secreción de la insulina, los niveles de glucosa... Y han plasmado sus conclusiones en dibujos. Algunos de ellos tuvieron la oportunidad de explicarles a los premiados el significado de sus obras. Como Sergio, que se inspiró en la necesidad de comer de forma saludable. O Inés, que plasmó «cómo el cerebro manda al cuerpo que deje de comer». O Jimena, preocupada porque «mi tía y mi prima siempre tienen el estreptococo y de mayor quiero inventar la cura». O Lucía, que se imaginó «cómo es el día a día de un niño diabético».

En primera fila escuchaban atentos Marco, Lara, Maeva, Noah, Sofía y Alba, de entre 6 y 8 años. Todos ellos han pasado por el programa de Aulas Hospitalarias y fueron los anfitriones de Svetlana Mojsov, Daniel J. Drucker y Jens Juul Holst a su llegada al hospital. Ellos conocen realmente cuál es la llave que les abrió «el camino a la vida y la esperanza» y expresaron en una emotiva carta su «profundo agradecimiento a los brillantes investigadores, como vosotros, y al excepcional equipo médico de este y otros hospitales por habernos dado la llave de la salud».

Los galardonados se mostraron encantados con los trabajos y las reflexiones de los escolares. «Confío de verdad en que os convirtáis en científicos para encontrar soluciones y curar enfermedades. No lo dudéis, vosotros podéis», les animó Mojsov. «Habéis aprendido una lección muy importante: que no es solo cuestión de fármacos, sino de estilo de vida», se alegró Holst. «Haced preguntas y sed curiosos. Esa será la receta del éxito para todas las facetas de la vida», les aconsejó Drucker.

De estilo de vida, fármacos y de éxito siguieron hablando después, en un ambiente completamente distinto. Los tres científicos participaron también en el HUCA en una sesión clínica muy especial. El Servicio de Endocrinología les presentó uno de sus casos de éxito, el de un paciente con diabetes y obesidad (140 kilos al inicio del tratamiento) que fue seleccionado para un ensayo clínico con tirzepatida. Algo más de un año después, con 39 kilos menos, dieta y ejercicio diario, el paciente agradeció en persona a los premiados sus investigaciones, claves para el desarrollo de este tipo de medicamentos que «han cambiado nuestra forma de tratar al paciente», admitió el jefe del servicio, Edelmiro Menéndez. «Soy médico de Atención Primaria y manejo muchos medicamentos, pero no hay ninguno que cambie la vida a un paciente como este», añadió Daniel Moro.

Los científicos se interesaron por la disponibilidad de los medicamentos en España y por la cobertura pública de los tratamientos. Los facultativos explicaron que está indicado para pacientes diabéticos con obesidad.