Los sectores más fuertes de IU Asturias apuestan por una lista con Llamazares

Predomina en IU la incertidumbre, una incertidumbre creciente que se quiere despejar en las reuniones previstas para la próxima semana. El lunes lo hará la colegiada, el órgano más directo de gestión, y el jueves será el turno de la coordinadora, el principal núcleo de dirección. En ambas citas se quiere trazar el rumbo a seguir para las elecciones y, primarias mediante, avanzar en el diseño de las candidaturas.

La clave del debate está en si Llamazares repetirá o no al frente de la lista. En esas reuniones debería comenzar a despejarse el escenario, teniendo en cuenta que el portavoz en la Junta es objeto de expediente por parte de la dirección federal y eso le inhabilitaría, según su criterio, para ir en la candidatura. La cuestión es si se va a un pulso con Madrid, si es posible alcanzar algún tipo de acuerdo o si se renuncia a batallar con Alberto Garzón y los suyos.

El movimiento de Llamazares de ofrecerse a dar un paso atrás afloja la presión sobre su persona y sitúa el debate en esos órganos de la semana que viene. Allí acudirá el portavoz, a quien ayer el coordinador en Asturias, Ramón Argüelles, invitó a «aclarar lo que quiera» a dirigentes y militantes. Llamazares asistirá aunque, en principio, su intención es remitirse a las explicaciones que ya ofreció por carta a Garzón y a los afiliados.

En el delicado reparto de mayorías en la actual dirección de IU, los sectores con más peso mantienen su criterio de que Llamazares repita en la candidatura. Dan por hecho que en el plano autonómico no se tomarán medidas sancionadoras contra el portavoz. Remarcan, eso sí, que debe dejar claro tanto su compromiso con el proyecto de la coalición en Asturias como la garantía de que marcará distancias con Actúa y no hará campaña por otras opciones políticas que confronten con IU fuera del Principado. Esa situación, razonan, haría difícil de justificar a la cúpula federal la eventual toma de medidas sobre IU de Asturias.

Sectores próximos a las tesis federales, por contra, dan por seguro que Llamazares se quedará fuera de la lista y vinculan a esa exclusión una candidatura de consenso.

Argüelles, por su parte, celebró el paso atrás de Llamazares al entender que «contribuye a bajar la tensión y no añade más pólvora al fuego», y derivó a la militancia, en unas primarias que se celebrarán en febrero, la decisión sobre la lista.