Juan Carlos I, un reinado con Asturias como protagonista

Asturias ha estado muy presente en su peripecia como Rey. El heredero de la Corona ostenta el título de Príncipe de esta tierra y a ella acudió don Juan Carlos por vez primera en 1955, con solo 17 años, para visitar el pozo Nicolasa. Su último contacto oficial acontenció en mayo de 2012, pero no sucedió aquí, sino en Madrid. Fue entonces cuando se entrevistó por última vez con un presidente asturiano, Javier Fernández.

Para acompañar a su hijo, el heredero que en 2014 se convirtió en Rey, y para arroparle en sus primeros actos públicos, como Príncipe y también entregando sus Premios en el Campoamor, para inaugurar espacios públicos de distinta índole y para apoyar especialmente todo lo que tuviera que ver con la industria pisó estas tierras, solo y en compañía de la Reina Sofía.

Pero su primera vez fue en Mieres, en el pozo Nicolasa, siendo un jovencito. Pocos recuerdos y testimonios quedan ya de aquel día. Pero también tuvo oportunidad de bajar a la mina más adelante, en concreto al pozo María Luisa, solo siete meses después de convertirse en Rey de España, en mayo de 1976. Las cuencas mineras estuvieron muy presentes en el periplo asturiano de un hombre que en 1961 vio por primera vez Gijón y lo hizo desde la torre de la Universidad Laboral. Convertido ya en heredero al trono español, en octubre 1971 acudía a Covadonga, en aras de entroncar con esa tradición de que el futuro Rey tenga a Asturias en su título de Príncipe, como viene sucediendo desde el siglo XIV. Entonces don Felipe tenía tres años y seis después, con nueve, sería él el protagonista de una solemne ceremonia. Y don Juan Carlos estuvo a su lado en el Real Sitio para verle convertirse en Príncipe de Asturias.

A partir de ese momento, el cumplimiento de sus tareas como jefe de Estado le trajo en numerosas ocasiones a la región, empezando por aquel día de octubre de 1981 en que escuchó a su hijo en el Teatro Campoamor pronunciar su primer discurso público en la ceremonia de entrega de los galardones entonces Príncipe de Asturias y hoy Princesa, de los que don Juan Carlos fue principal impulsor. Oviedo ha estado, pues, muy presente en la agenda del emérito, coincidiendo con importantes personalidades llegadas para recoger sus premios y ha visto crecer y madurar a su hijo.

Inauguraciones, visitas a empresas y un sinfín de actos más se fueron sucediendo a lo largo de cuatro décadas de reinado en las que no han faltado instantáneas campechanas y sonrientes de oriente a occidente y de norte a sur. En febrero de 1989 el motivo de su visita era inaugurar la acería LDIII de Ensidesa. En mayo de 1998, junto con la Reina Sofía y siendo presidente de Asturias Sergio Marqués, visitó las instalaciones de la factoría de Gijón, con motivo de la puesta en marcha uno de los dos altos hornos. La factoría que Thyssenkrupp tiene en Mieres, las minas de oro de Belmonte de Miranda y la fábrica de Bayer en Langreo fueron otros destinos de quien inauguró el Museo de Anclas de Salinas en 1993, se dejó fotografiar en los monumentos prerrománicos del Naranco o en el Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, en 2009. El álbum es amplio, va del blanco y negro al color y oficialmente ha quedado ya cerrado.