Barbón ve un acierto la vicepresidencia de reto demográfico de Teresa Ribera

La acción del Ministerio de Transición Ecológica que hasta ahora llevaba Teresa Ribera ha sido objeto de críticas en Asturias. La celeridad con la que se ha aplicado el proceso de transición en la región, con el cierre de térmicas como punta de lanza, soliviantó a diferentes sectores, que temen por una destrucción del tejido industrial de la región. El propio Gobierno regional manifestó por boca de su vicepresidente, Juan Cofiño, que el proceso de descarbonización se estaba desarrollando «más rápido» en Asturias de lo que en principio había planteado España. Ayer Barbón, en un tono muy conciliador, destacó que tanto la transición ecológica como el reto demográfico son dos «prioridades absolutas para Asturias» y destacó la «sensibilidad» de Teresa Ribera en ambos ámbitos.

No fue el único asunto al que se refirió ayer el secretario general de los socialistas en la comunidad. Barbón quiso dedicar unas palabras de reconocimiento a María Luisa Carcedo, que deja el Ministerio de Sanidad. «Ha hecho una excelente gestión con hechos concretos que también afectan a Asturias, como el Centro de Enfermedades Neurológicas de Barros». Barbón destacó que Carcedo es «una militante ejemplar» que asume las responsabilidades que se le encomiendan con «un nivel altísimo de autoexigencia y compromiso. También queremos reconocerle la forma tan elegante con la que cesa en sus funciones». El presidente del Principado afirmó que la salida de la ministra asturiana no le pilló por sorpresa. Las negociaciones con Unidas Podemos ya habían hecho vislumbrar que el Ministerio de Sanidad perdería competencias. «Ya se aventuraba que ese ministerio tan potente que tenía María Luisa Carcedo desaparecía. De ese departamento salen ahora tres».

La salida de María Luisa Carcedo deja a la región sin la única asturiana en el Consejo de Ministros, un hecho que partidos como Ciudadanos y Foro interpretan como una pérdida de peso político de Asturias. Barbón defendió en cambio que el papel que juega ahora Adriana Lastra, cuya influencia política ha crecido en los últimos meses, es «la mejor garantía» de que la agenda asturiana «se pondrá encima de la mesa del Consejo de Ministros». El presidente del Principado hizo una encendida defensa de la riosellana, a la que quiso reconocer su papel en la consecución de los pactos que han llevado a Pedro Sánchez de nuevo a la Moncloa. «Es nuestra mejor aliada».

Aunque el nuevo Ejecutivo aún no está formado, son tres los nombres que todavía no se han anunciado. Más allá de quién ocupe las carteras, desde el Gobierno regional se muestran «satisfechos» por el hecho de que haya un Ejecutivo con plenas funciones. «La investidura resuelve los problemas de interinidad que tanto daño hacían a Asturias. Tenemos mucho que acordar, exigir y pactar con el Gobierno de España», señaló Adrián Barbón.