La Corporación recoge el bollo por turnos

El número dos de su gobierno y líder de Ciudadanos, Nacho Cuesta, hizo cola para recoger el recibo y luego el bollo y señaló al Campo como una de las prioridades del equipo de gobierno: «Queremos que vuelva a ser el punto de encuentro de las familias» y no solo en este «día tan especial». La nueva licitación de las obras de recuperación del kiosco del Bombé es uno de los signos de un gobierno en marcha, de un espacio «en vías de recuperación», sostuvo, como también el apoyo a las terrazas, «para hacer viables negocios» que han sufrido con la pandemia y que suponen, insistió, «un beneficio para la ciudad».

Si no se juntaron para comer el bollo, tampoco cabe esperar que coincidan en el análisis. La socialista Ana Rivas destacó el contraste entre «que hayan usado de excusa la pandemia y, a la vez, que digan que el Ayuntamiento no se ha parado en ningún momento». Para el principal grupo de la oposición, ha habido «imaginación para adaptar algunas cosas y hacer otras novedosas, hay que reconocerlo», pero no capacidad ni voluntad para «ayudar a las personas y a las empresas. Con decir que han cobrado las ayudas este 2021, está todo dicho». Rivas afeó al equipo de gobierno su empeño «en ir solos y en no escuchar a los demás, en perder más tiempo en deshacer que en construir».

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Lo mismo que le reprochó Somos. Ana Taboada y Nacho Fernández del Páramo, flanqueados por los diputados de Podemos Daniel Ripa y Rafa Palacios en el paseo de los Álamos, repasaron todos los avances o proyectos paralizados por el bipartito durante este medio mandato: «Se han pasado dos años destruyendo lo que hicimos, eso no ha sido inteligente», resumió la portavoz Ana Taboada.