Sheila O'Leary ha sido condenada a cadena perpetua por la muerte de su bebé, de solo 18 meses. La sentencia se conocía el pasado 29 de agosto, cuando el juzgado estadounidense la declaró culpable de seis cargos, entre ellos asesinato en primer grado. El pequeño Ezra O'Leary falleció por inanición y desnutrición.
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La mujer, de 38 años y residente en Florida, seguía una estricta dieta vegana que solo incluía frutas o verduras crudas y que también quiso que siguiera su bebé, que terminó muriendo en 2019. Durante la investigación los agentes de la Policía descubrieron que otros dos hijos de la pareja, de 3 y 5 años, también presentaban signos de desnutrición.
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Tras confirmarse la muerte del pequeño, el equipo de sanitarios pudo comprobar que el niño pesaba solo 8 kilos y tenía el aspecto de un bebé de solo siete meses. Así tanto la madre como su marido, Ryan Patrick O'Leary, fueron detenidos. O'Leary permanece en prisión a la espera del juicio. Según ha confirmado la cadena de televisión 'WINK', el abogado de la mujer acusada por la muerte de su hijo, Lee Hollander, señaló que apelarán el veredicto.
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