Moriyón regresa a la Alcaldía con un gobierno tripartito de Foro, PP y Vox

Con el respaldo de los populares garantizado quedaba sumar a Vox, algo que no terminaba de gustar, pero que se vio como la única salida posible para llegar al poder. Las principales reticencias eran las de darles entrada en el gobierno ciñéndose a los acuerdos programáticos. Pero los de Vox presionaron dejando claro desde el primer momento que no cederían ni un ápice hasta que se diera el espacio que creen que merecen sus votantes. Y con ese tesón en la negociación acabaron consiguiendo parte de lo que se proponían.

En tres días Foro pasó de levantarse prácticamente de la mesa sin atender a sus demandas, a casi cinco horas de encierro en su sede para acabar ofreciéndoles un puesto en la junta de gobierno y una concejalía. Según el acuerdo, que adelantó EL COMERCIO, será la de Festejos, que lleva consigo, además, una empresa municipal, Divertia. Es decir, Foro ha renunciado a una de sus competencias, sin tocar a las del PP para que este acuerdo fuera posible. La intención, pero aún no está decidido, es que los de Vox se distribuyan las dos tareas: Sara Álvarez Rouco, sea quien forme parte de la junta de gobierno, y Oliver Suárez se quede al frente de los Festejos. A nadie escapa, además, que precisamente de ahí cuelgan la vuelta de las corridas de toros a El Bibio, uno de los aspectos sobre los que más ahínco se puso durante la campaña.

Pero los puntos, que pudieron consultarse al completo en primicia en este diario anoche en la edición digital, también contemplan otros asuntos que generarán polémica. Ahí está el compromiso de redactar una nueva ordenanza de igualdad, la participación de Vox en la designación de la persona titular en la Dirección General de Políticas de Igualdad y la congelación de las políticas de promoción lingüística en su situación actual «sin que puedan existir incrementos en las partidas presupuestarias destinadas a las mismas».

El acuerdo también recoge materias de transparencia y buen gobierno, como una auditoría a las empresas y organismos autónomos; de movilidad, que son muy coincidentes con lo que defendía Foro, como la redacción de una nueva ordenanza de Movilidad; y algo que no gustó nunca a las fuerzas de derechas, la derogación vía proposición normativa tramitada de urgencia, del Reglamento de Laicidad.

Cordón sanitario

Mientras todo esto pasaba, IU lanzó ayer casi sobre la hora un llamamiento a establecer un cordón sanitario sobre Vox, instando a PSOE y Foro a negociar. Nunca dijeron si estarían dispuestos a dar sus votos. Las dos fuerzas de izquierdas, PSOE y Podemos dijeron que lo que correspondía era que gobernase la fuerza más votada, los socialistas, y así Carmen Moriyón cumpliese con su compromiso de no pactar con Vox.