La Guardia Civil juzga crucial el testimonio de los heridos para aclarar la tragedia de El Musel

La investigación para determinar las causas que desencadenaron el trágico accidente en el que murieron dos trabajadores de una empresa de montajes en El Musel se encuentra aún en fase inicial. La Guardia Civil juzga crucial los testimonios de los supervivientes, de los operarios que participaban en el desmontaje de una grúa de descarga de barcos en desuso, la misma de la que se desestabilizó el casetón (de gran tonelaje), arrastrando las dos grúas de El Roxu que la sujetaban.

Esas declaraciones aún no han sido aportadas ante la Benemérita, a la espera de la evolución de los heridos: hay cuatro afectados, dos de ellos graves. El de peor pronóstico permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del HUCA. El otro compañero fue trasladado al Hospital de Jove y su vida no corre peligro.

La grúa puente que se vino abajo era la tercera que desmontaban en el Muelle Moliner por encargo de la naviera Ership-Alvargonzález, que había subcontratado los trabajos a Montajes Astur Manzana (M. A. N.). A su vez, esta última compañía (a la que pertenecían las dos fallecidos) había contado con los servicios de dos grúas de grandes dimensiones de El Roxu.

Uno de los aspectos en los que se centra la investigación es por qué no se activaron los sistemas de bloqueo de las grúas al detectar un peso superior al que pueden soportar, una medida de seguridad crucial en este tipo de vehículos para evitar vuelcos debido al manejo de las cargas.

Los dos operarios fallecidos se encontraban realizando los trabajos en altura, en el casetón, durante la complicada maniobra de enganche del casetón, que ya habían ejecutado con éxito en el desmantelamiento de las anteriores grúas. Fue sin embargo en ese momento, en apenas unos segundos, cuando la pieza de gran tonelaje se desestabilizó y a su vez arrastró a las dos grúas pluma que debían sujetarla. El casetón acabó cayendo al mar y las dos grúas quedaron volcadas sobre el asfalto. La caída de los dos operarios fue nefasta. El fallecimiento se produjo en el acto.

Agentes del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil realizaron una inspección ocular en el lugar, acompañado de un reportaje fotográfico para recoger el estado en el que quedaron las tres máquinas implicadas en el accidente, crucial de cara al procedimiento judicial, en el cual se personarán las familias como acusación particular. El juzgado de guardia abrió la pertinente investigación para depurar responsabilidades. Está a la espera de recibir las diligencias policiales, que se acompañarán pasadas unas semanas de las declaraciones en la sede judicial de los testigos, los responsables de la empresa de montajes, de los gruistas y de los responsables de seguridad. La investigación, según fuentes conocedores del caso, se prevé larga y compleja.

Por su parte, el vertido de gasóleo de la grúa puente que se precipitó a las aguas de El Musel ha sido dado por controlado después de que se desplegara la barrera anticontaminación poco después del siniestro para confinar los aproximadamente 1.200 litros de combustible.

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