Las empresas ligadas a la economía azul facturan de media 2,5 millones de euros

En un momento en que, como señaló el director de EL COMERCIO, Marcelino Gutiérrez, «el mundo y Europa dirigen su mirada hacia la economía sostenible y azul», Gijón busca aprovechar esa «gran oportunidad» y tomar impulso gracias a su pasado marítimo para ejercer un liderazgo futuro en este sector emergente que ya tiene un importante peso en la ciudad. El estudio diagnóstico encargado por Impulsa y desgranado ayer por su gerente desvela que la economía azul, que comprende «todas las actividades económicas sectoriales e intersectoriales basadas o relacionadas con los océanos, los mares y las costas» tiene un peso en la ciudad de 683,8 millones de euros, es decir, aporta a su economía un 13% del Valor Agregado Bruto (VAB) total, y da empleo de forma directa a 8.264 personas, efecto que asciende a 13.619 trabajadores si se tienen en cuenta el empleo indirecto y el inducido.

Excluyendo el turismo costero, en la ciudad hay 156 empresas que desarrollan su actividad bajo el paraguas de la economía azul. Todas ellas generan -según datos de 2019- un VAB de 278,3 millones de euros, es decir, el 5,3% del total de la economía gijonesa. Es decir, el peso del sector azul sobre la economía de la ciudad es seis veces mayor que en el conjunto del país (0,9) y casi siete veces mayor que el de de la Unión Europea (0,8) sin contar con Reino Unido. Son las actividades portuarias, con unos efectos totales de 147,9 millones de euros, las que más aportan al conjunto del municipio; seguidas de la explotación de los recursos marinos vivos, con actividades como la pesca o la acuicultura que generan 51,2 millones, la construcción y reparación naval (46,1), el transporte marítimo (25,5) y la formación marítima (7,4).

En cuanto al empleo, estas empresas aportan 4.695 puestos de trabajo (2.250 directos, 1.479 indirectos y 967 inducidos), es decir, son responsables de un 4,9% del empleo generado en la ciudad. La generación de empleo va ligada al peso económico de cada actividad, siendo de nuevo las actividades portuarias las que más aportan (2.408 trabajadores), seguidas del aprovechamiento de recursos marinos (1.015), la construcción y reparación naval (686), el transporte marítimo (408) y la formación especializada, subsector del que dependen 183 puestos de trabajo. La economía azul gijonesa tiene igualmente mayor peso en el conjunto del país, donde este sector representa un 1% del total , y la europea, donde supone un 0,8% de los empleos.

Dos de cada tres empresas y organismos de la economía azul en Gijón pertenecen a los subsectores de la pesca o la acuicultura, el transporte marítimo y las actividades portuarias. Según su tipología, el 57,7% de las empresas del sector son microempresas, el 30,8% pequeñas y el 11,5 medianas, con un peso de las pequeñas y medianas empresas sensiblemente superior a la media del tejido empresarial gijonés. De acuerdo a su forma jurídica, seis de cada diez son sociedades limitadas.

Las empresas vinculadas a la economía azul de la ciudad, tengan o no domicilio social en Gijón, facturaron una media de 2,5 millones de euros en 2019. Por sectores de actividad destaca la facturación media de las actividades portuarias -4,9 millones de euros, aunque el 24,1% de estas organizaciones supera los 5 millones anuales- y la construcción naval (4,2), seguida de las empresas de aprovisionamiento (2,7) y el transporte marítimo (1,9). La pesca y la acuicultura, pese a tener un fuerte peso en el empleo, facturó 1,6 millones de euros. Y la formación, como es lógico, es la que menos genera en términos de facturación: 0,5 millones de euros.

Cabe destacar, igualmente, que tres de cada diez empresas gijonesas pertenecientes a la economía azul exportan productos o servicios al exterior, siendo los servicios auxiliares, las actividades portuarias, los recursos marinos vivos y el transporte marítimo los que concentran mayor actividad exportadora. Y aunque el 37,2% de las empresas pertenecientes a este sector no superan los diez años de antigüedad, la edad media de las empresas del sector es de 22,4 años.

Una vez puesta sobre la mesa la importancia del sector para la ciudad, Luis Díaz remarcó que el proyecto estratégico Gijón Azul busca «combinar la historia industrial de la ciudad, ya vinculada al mar, con nuevas actividades de alta intensidad tecnológica e innovación». En este sentido, desde Gijón Impulsa «podemos detectar las oportunidades que ofrece este tejido y tratar de alinear nuestras propuestas de servicio para que ese ecosistema se desarrolle convenientemente».

Habló del apoyo que el ente municipal proporciona a la creación de empresas, proporcionando financiación, preaceleración, asesoramiento y consultoría y destacó la capacidad de Impulsa para contribuir a la consolidación de empresas con programas de consultoría en dirección estratégica. Asimismo, añadió, «queremos incorporar un proyecto de consultoría para proyectos de ámbito europeos». También remarcó las herramientas de financiación, en forma de avales, capital riesgo y subvenciones a fondo perdido,

y se puso a disposición de todos los contribuyentes a la economía azul: «Nos gustaría ser ese agente que pone en relación a las administraciones que tienen una necesidad concreta y puntual con todo el tejido empresarial e innovador que puede proporcionar una solución en concreto».