A. Arce
Lunes, 29 de mayo 2023, 15:36
La cuenta en el Ayuntamiento de Oviedo de cara al Pleno de investidura del próximo día 17, sábado, es una, única y no da lugar a segundas opciones. Alfredo Canteli cosechó ayer para el Partido Popular la mayoría absoluta. La última la había logrado Gabino ... de Lorenzo en 2007, la última, porque la perdió cuatro años después. Canteli obtuvo ayer 14 concejales, el doble que el PSOE, un total de 46.849 votos (el 42,5%) y tiene todas las cartas de la baraja en su mano para jugar la partida durante cuatro años más. Una victoria in extremis, eso sí, porque el edil número 14 no apareció en el escrutinio hasta el último momento y por apenas unos cuantos votos sobre los socialistas. La escena, esta mañana, entre las filas de los populares, en mitad de una profunda resaca electoral, era de continuación de la fiesta; y también la de un ajetreado entre las felicitaciones alcalde en funciones. La del tercer alcalde de la democracia en Oviedo que gobernará, al menos, durante dos mandatos consecutivos por detrás del propio De Lorenzo y del socialista Antonio Masip.
Publicidad
Noticia Relacionada
Con todo, la marea del PP que ha teñido de azul una gran parte del territorio nacional, sumando un buen puñado de comunidades y ayuntamientos, arrasó también en Oviedo, dejando a la izquierda, a pesar de la vuelta de Izquierda Unida al Consistorio de Gaspar Llamazares con 3 concejales, sin ninguna posibilidad. La marca de los conservadores está en un periodo dulce y se ha notado en las 11.436 personas más que han decidido confiar en la opción de Canteli con respecto a 2019, el que había sido el peor resultado habido por el PP en la capital asturiana. Por el contrario, los 7 ediles del PSOE, tras perder uno, han relegado al socialista Carlos Fernández Llaneza, al que han votado 26.632 ovetenses, a una posición de debilidad, sin opciones para gobernar y como de líder de la oposición. Un premio de consolación que sabe a poco, menos si se tiene en cuenta que a Adrián Barbón lo han votado 6.761 ovetenses más que a él mismo y que, en el caso de las elecciones a la capital, han optado por otra opción política por mucho que su voto en las autonómicos fuese socialista. Una de ellas ha podido ser la de Llamazares.
Canteli ganó en Oviedo de manera contundente, ha absorbido una gran parte del electorado de Ciudadanos, que ha perdido toda representación en el Ayuntamiento después de ocho años, y no necesitará entenderse con Vox, como sí le ocurrirá al PP en otras comunidades y municipios. La victoria de unos siempre es la derrota de otros. El líder de Cs, Luis Pacho, hacía el siguiente balance de la situación: «Sabíamos que era complicado, pero nunca esperas una derrota sin paliativos como esta ha sido. Ha sido dura, y yo verdaderamente lo siento por la gente que trabajó en la campaña, afiliados, apoderados, que siempre tienen esa ilusión», ha lamentado. «Sabíamos que era difícil, pero siempre es duro, y ha sido una derrota ya no sólo a nivel de Oviedo, sino supramunicipal y 'supraasturias'». Un «descalabro».
Noticias Relacionadas
Desaparece Podemos del Consistorio, también ocho años después. Se ve que uno de los ciclos de la denominada nueva política llega a su fin mientras otro, el de Vox, también en la suma de esos nuevos partidos, continúa ganando adeptos, como se vio en Oviedo, donde Sonsoles Peralta ha ganado un concejal, pasando de dos a tres. La líder de la formación morada, Belén Suárez Prieto se ha mostrado «tranquila», pero «disgustada y preocupada» por lo que resulta del análisis del resultado. Se trata de un «avance de la derecha y de la extrema derecha y también enmarcado en la debacle de Ciudadanos, cuyo voto se fue a la derecha». Por un momento pensó que podría llegar a sumar un concejal, aunque al final no fue así. También admite que le ha «pasado factura la crisis de Podemos Asturias».
Pese a la mayoría absoluta de Canteli, la otra gran victoria de la noche fue la de Gaspar Llamazares, que logró tres ediles y 11.191 votos (716 menos que Vox) para una IU-Convocatoria por Oviedo que había desaparecido del tablero político municipal hace ahora cuatro años. Su balance, concreto. «Ha sido un vendaval de la derecha que confirma las impresiones de un cambio político»; no obstante, ha indicado, «hemos cosechado un resultado excelente por encima de nuestras expectativas». Uno que; sin embargo, no le sirve a la izquierda y que va en sintonía con lo ocurrido en todo el país a pesar de haber logrado Llamazares que le votasen más del doble de ovetenses que a su homólogo en la Junta General del Principado, Ovidio Zapizo. Y es que la izquierda, cuando concurre dividida a las elecciones, tiende a malos resultados en el cómputo global. Por el camino se han quedado los 4.906 votos de Belén Suárez.
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.