laura castro
Martes, 1 de octubre 2019, 19:56
Arcelor ya lo había advertido el pasado viernes: «Todas las instalaciones de Asturias sufrirán paradas de aquí a final de año«. Y con esa hoja de ruta, marcada por la crisis del acero, la multinacional llevará a cabo la mayor detención desde la crisis. Entre el 6 y el 13 de octubre todas las instalaciones de acabados de Avilés pararán, de media, tres días, a excepción de la línea de galvanizado 1 que dejará de producir durante toda la semana. Las instalaciones afectadas son, concretamente, decapado, tándem 1 y 2, precocido continuo, témper 1 y 2, las dos líneas de galvanizado y las dos de hojalata.
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Esta nueva medida afectará a unos 500 trabajadores de plantilla y a otros 50 de las subcontratas. La empresa aplicará en primer lugar los descansos, vacaciones y reconocimientos médicos y, en última instancia, recurrirá al expediente de regulación de empleo.
Los sindicatos, que permanecieron reunidos con la multinacional hasta hace apenas unos minutos para abordar la negociación del convenio regional, urgen al Gobierno central y a la Unión Europea a tomar medidas para frenar la crisis que sufre el sector siderúrgico.
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