Un consorcio invertirá 8.000 millones de euros para suministrar hidrógeno verde a Arcelor

El proyecto es gigantesco, aunque nace ya con la idea de ser escalable, crecer aún más y sumar nuevos actores. Los planes pasan por instalar 9,5 GW de capacidad de electricidad fotovoltaica y 7,4 GW de potencia de electrólisis para 2030. La producción, no obstante, comenzará antes, en 2025. Un año después, en 2026, el objetivo es producir 200.000 toneladas de hidrógeno y en 2030 elevar la cifra hasta 330.000.

El consorcio estudia ahora la ubicación de los parques solares, que producirán electricidad exclusivamente para los electrolizadores. Los lugares que se barajan se encuentran en Castilla y León, Aragón y Navarra. Y también se discute dónde colocar las gigafactorías para producir el hidrógeno, en principio, en esas regiones. No obstante, no se descarta que en Asturias pueda llegar a haber una de esas plantas con potentes electrolizadores. En total, la infraestructura de generación costará alrededor de 6.500 millones de euros.

Después, para que ese hidrógeno llegue a Asturias, Enagás construirá una red que lo canalice hasta la región, para la que se prevé una inversión de 1.500 millones de euros. Para acelerar el proceso de autorizaciones y facilitar su instalación se utilizará el mismo trazado que emplean las tuberías de gas natural actuales. Este proyecto contribuirá a la independencia energética del país, ya que suministrará el equivalente al 5% del gas natural importado por España. De ahí que Marcelino Oreja, consejero delegado de Enagás, considere «un hito» la participación de la compañía en HyDeal España, consorcio en el que «jugará un papel importante».

Arcelor y Fertiberia serán los grandes compradores de esta energía limpia, con un plan para adquirir 6,6 millones de toneladas durante los próximos 20 años, lo que supondrá evitar el 4% de las actuales emisiones de CO2 de España. Una de las principales bazas del proyecto es el precio. Con su escala, los promotores esperan poder ofrecer un coste de 1,5 euros el kilogramo, similar a los actuales combustibles fósiles. Se conseguirá, según aseguran desde HyDeal España, gracias «a un modelo industrial y financiero disruptivo» que permitirá conectar de forma directa la producción de hidrógeno renovable en grandes cantidades y su consumo rentable en un largo plazo, de modo que sea un sistema sostenible, que se podrá operar sin subvenciones.

Para Thierry Lepercq, presidente de la plataforma y portavoz de HyDeal Ambition -un consorcio europeo mayor, que integra a 30 grandes compañías energéticas-, el mensaje que se lanza con este proyecto es «histórico», ya que convierte al hidrógeno en «el arma perfecta a gran escala contra la crisis climática y los precios vertiginosos de la energía», un producto completo, «capaz de competir con el carbón, el petróleo y el gas natural». Por su parte, Philippe Esposito, presidente de DH2 Energy, que actuará como desarrolladora del proyecto, destaca que se podrá «colocar a España y a su industria en el medio plazo como un actor relevante entre las principales naciones productoras de energía en el mundo» y, a la vez, «en un entorno competitivo muy favorable».

De hecho, Arcelor y Fertiberia esperan situar su producción en Asturias a la vanguardia de la sostenibilidad, produciendo acero, amoniaco y fertilizantes verdes, pero también otros productos industriales y energéticos bajos en carbono. En este sentido, el presidente de Arcelor en España, José Manuel Arias, ve «estratégica» la alianza, que permitirá que la siderúrgica cuente con el hidrógeno verde necesario para descarbonizar sus plantas. «Será clave para permitirnos alcanzar nuestro objetivo de reducir en un 50% las emisiones de CO2 de nuestra actividad en España para 2030. Al mismo tiempo, otros sectores de la economía podrán también beneficiarse del potencial ofrecido por el hidrógeno como solución energética limpia y sostenible», señala, ya que esta iniciativa está abierta a que se incorporen nuevos actores e industrias.

Por su parte, el consejero delegado de Fertiberia, Javier Goñi, califica la alianza de «ambiciosa» y permitirá que las cuatro grandes plantas del grupo cuenten con proyectos para sustituir el amoniaco de origen fósil por amoniaco verde.