«No hay dos derbis iguales»

Las estadísticas no son precisamente certeras, pero sí un punto de referencia si quien lo dice es un oviedista o quizás no tanto, dirán otros tras observar los datos, menos ventajosos para los intereses sportinguistas. Porque un derbi es algo diferente cuando te has criado con la elástica del Oviedo o del Sporting. Una especie de emboscada dos veces al año.

«El vestuario sabe que es un día especial para todos. Tienes la presión de dar una alegría a la afición», afirma el exoviedista Toché, ahora director deportivo del Orihuela. «No es una semana normal. La gente te transmite incluso cuando vas caminando por la calle la importancia de este partido y las ganas de ganar», añade el exdelantero, que acumuló cuatro derbis en sus casacas. En parecidos términos se manifiesta el exsportinguista y ahora agente de futbolistas Raúl Lozano. «Son duelos que se viven diferente. Lo ves en la gente desde principios de semana. Pero es muy bonito jugarlos».

El partido en el Tartiere terminará inundado por la lógica. Ganará posiblemente el mejor. Perderá el peor, el inferior, el más irreconocible. Porque por mucho que el Sporting camine hoy tres puntos por encima del eterno vecino, que ha sumado ocho puntos en los últimos cinco encuentros, por los seis de los de Abelardo, los derbis son otra cosa. «Cada partido, cada año, es diferente. Pero ojalá que el balance se siga decantando del lado azul como estos últimos años», hace hincapié Toché. «No hay dos derbis iguales», advierte Lozano. «Al final son rachas. No se lo lleva el favorito, sino el que más concentrado esté, el que más ganas ponga...».

El asalto del Sporting al Tartiere en el primer enfrentamiento de este siglo, en la temporada 2001-2022; las tres victorias del Real Oviedo en El Molinón por idéntico resultado (0-1) en las campañas más recientes (2019-2020, 2020-2021 y 2021-2022); la última victoria rojiblanca en El Molinón en el duelo de vuelta de la temporada 2018-2019 con José Alberto; la fortaleza de los azules en el Tartiere en los últimos seis derbis, en los que el Sporting no fue capaz de sumar nunca de tres...

«Yo apuesto por un doblete de Borja Bastón», dice quien marcó para el Oviedo en el duelo de la temporada 2017-2018 y dejó aquella imagen enseñando el brazalete de capitán a la grada. «Me gusta que se recuerde aquel gesto y me sigue encantando haber metido aquel gol después de tantos años fuera de Segunda». Lozano también dejó su sello en un derbi. Concretamente, en dos. «Es uno de los mejores recuerdos que tengo como futbolista. Me hizo ilusión y la gente aún me lo recuerda»», dice el exfutbolista, que tiene claro el resultado: «1-2».

En un derbi no se ganan títulos. Quizás se logren revanchas personales. Pero sí suele haber goles, tensión y grandeza. «Todo es diferente. Sobre el campo pasan muchas cosas. Hay mucho lío. No conoces a ningún rival, aunque fuera sean amigos», explica Lozano. La contundencia de los números de los oviedistas no han dejado, sin embargo, tocado al equipo rojiblanco, que piensa que esta vez puede ser la suya. «Ojalá se dé hoy y ganemos, añade. La primera victoria de Abelardo como entrenador del primer equipo en el Tartiere.

La primera y única victoria rojiblanca de este siglo XXI en un derbi se remonta a la temporada 2001-2002. Dos equipos, fútbol vistoso, vertical, la estética representada en un terreno de juego y un jugador ya desequilibrante pese a su juventud. Ante un Real Oviedo recién descendido de la Liga de las estrellas y con un Sporting que caminaba por la Segunda con paso dubitativo, 'El Guaje' Villa mandó callar a la grada del Tartiere y rubricó un triunfo que había encauzado anteriormente Lozano.

Álvaro Cervera y Abelardo, curiosamente debutantes como jugadores de la Selección Española el mismo día -4 de septiembre de 1991- y en el mismo escenario -Carlos Tartiere-, son dos entrenadores fieles a sus ideas: el equipo sufre, pelea y compite, pero no se rinde nunca. Hoy vivirán su primer derbi. Un partido especial que ofrece imágenes vivas pese al paso del tiempo: Villa mandando callar a la afición azul en el Tartiere, la ruptura de relaciones entre los dos clubes tras reclamar los oviedistas un posible penalti de Peybernes sobre Ibra, Toché enseñando el brazalete de capitán tras igualar el gol de Carmona, la victoria con un gol de Borja Sánchez en un El Molinón vacío, la imbatibilidad de Ziganda en los derbis, el incidente de Christian Rivera y Femenías...