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A. S. González
Oviedo
Viernes, 30 de septiembre 2022, 02:10
«El histórico día en el que un 'amasandero' apodado Superpan ganó al poderoso hombre de acero y a todos los súperes de agrosuper» ha llegado. Un panadero chileno, de nombre Gonzalo Montenegro, ha vencido la batalla legal que emprendió contra él DC Cómics al denunciarle por infringir los derechos de autor.
El origen de la disputa reside en el nombre del pequeño y modesto negocio que regenta el demandado desde hace más de dos décadas. 'Superpan' es un comercio de barrio ubicado en la localidad de Quinta Normal, en Santiago de Chile.
La panadería nació bajo otro nombre pero el hecho de que su dueño vistiera habitualmente con una camiseta de Supermán llevó a sus propios clientes a dar al lugar el sobrenombre de 'Superpan', apodo que acabó por convertirse en nombre oficial.
La decoración de la tienda hace guiños al superhéroe tantas veces inmortalizado en la gran pantalla y, de hecho, su figura luce en el luminoso de la entrada. Aunque parezca un misterio cómo, la existencia de la 'amasandería' llegó a oídos de DC Comics.
La firma interpuso una denuncia contra el local por infringir los derechos de autor, argumentando que el nombre de la marca causaba confusión y les perjudicaba. Tras casi tres años de litigios, el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) de Chile ha acabado por dar la razón a su compatriota.
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El panandero, según su resolución, no infringió la propiedad intelectual y puede continuar usando el nombre elegido por él y por sus clientes para su negocio. La editorial, de hecho, no fue la única en denunciarle. También lo había hecho la agrupación Agrosuper, que le acusó de plagiar algunas de sus marcas, como «Superpollo», «Supercerdo».
En declaraciones a los medios locales, Montenegro vincula que la maniobra de DC Cómics con un malentendido. Fruto de un error, la compañía habría credo denunciar a una corporación en lugar de una tienda de barrio que regala a los vecinos el pan que les sobra. «Me encontraron a mí, un tipo humilde al que iban a despojar de todo por el apodo que adoptó por admiración a Superman cuando era niño«, explica.
El pequeño empresario brinda su triunfo a todos los emprendedores que se «descrestan» por salir adelante. «Basta de abusos, de ponernos trabas a los comercios de barrio», clama. Es la victoria pequeño emprendor, apodado superpan, ante Dc cómics y Agrosuper, en esta ocasión convertidos en poderosos villanos a los que su batalla legal les ha salido rana.
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