ALBERTO SANTOS
AVILÉS.
Miércoles, 23 de septiembre 2020, 00:35
El Puerto de Avilés no es ajeno de la crisis económica provocada por la pandemia mundial y sus cuentas notan la fatiga del freno de la actividad productiva desde el estado de alarma en el mes de marzo. Las estadísticas al finalizar el ... mes de agosto arrojan una pérdida de ingresos por la actividad portuaria que se sitúa en torno a los dos millones de euros. Se espera que el último trimestre sea mejor, pero no podrá frenar un registro global que superará por poco los cuatro millones de toneladas.
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La crisis para el puerto avilesino tiene sobre todo un protagonista: la caída de la actividad siderúrgica en ArcelorMittal. La ralentización del sector del automóvil ha tenido consecuencias en los últimos meses, no solo con la parada de un horno alto en Gijón, sino también con la reducción de actividad productiva en casi todas las divisiones de la multinacional en Asturias. De ahí que la bajada del tráfico de mercancía general haya sido en agosto de un 26,19%, una cifra que se dispara al analizar el acumulado del año 2020, donde la variación negativa en este concepto en el puerto de Avilés ha sido de cerca de un 50% (-49,40%), al pasar de 1.110.083 kilos de mercancía de enero a agosto de 2019 a 561.723 este año. En el total, la caída de tráficos es de un 22,84%.
En segunda posición se sitúan los graneles sólidos, que cayeron en agosto un 13,82% y registran un descenso en lo que va de año del 14,52% con respecto al mismo periodo del año anterior.
Las cifras de agosto fueron negativas en casi todas las parcelas, menos en la del tráfico del puerto pesquero, donde se registró un incremento de un 19,22%. El resto de tráficos (graneles líquidos y avituallamiento) también cerró el mes en negativo, pero con unos porcentajes que no llegan al 1%.
En el acumulado, los graneles líquidos experimentan un 3,91% de incremento con respecto a los primeros ocho meses del año en 2019, mientras que la pesca se mantiene en números positivos, con una subida del 2,80%.
Las perspectivas que se manejan desde la Autoridad Portuaria de Avilés pasan por una mejoría en el último trimestre del año, gracias a la entrada de barcos con mineral de zinc en los próximos días, además de slabs con destino a ArcelorMittal. También se espera que poco a poco se vayan estabilizando mercados como el del automóvil, lo que tendrá una repercusión en la actividad siderúrgica.
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De todas formas, por mucho que mejore la situación de aquí a diciembre ya nada podrá frenar un balance de año muy negativo por la coyuntura económica mundial. Los cálculos que se manejan desde los despachos del puerto superan ligeramente los cuatro millones de toneladas de mercancías en 2020, una cifra muy lejana a los cinco millones que eran la tónica habitual en los últimos años.
En la Autoridad Portuaria de Avilés se asume que será un año malo, pero sin vislumbrar repercusiones de calado en el plan de inversiones que está puesto en marcha. Es decir, a día de hoy no se contempla detener ninguno de los proyectos previstos. Algunos están ya en fase de licitación y adjudicación, por lo que seguirán adelante. Hay margen para afrontar un año con una merma considerable de ingresos por actividad de tráfico de mercancías.
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La situación actual tampoco tendrá efectos sobre la plantilla del puerto, ya que se considera que está bastante ajustada en cuanto a carga de trabajo.
Por otro lado, en la reunión del consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Avilés celebrada ayer se aprobó la renovación del contrato con la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar), para la prestación del servicio general de ordenación, coordinación y control de tráfico marítimo, y la realización de labores de coordinación y actuación en emergencia por contaminación marina accidental en el Puerto de Avilés.
El 19 de marzo de 2014, se firmó el acuerdo marco de colaboración entre Sasemar y el Organismo Público Puertos del Estado con la finalidad de regular las condiciones de la contratación entre Autoridades Portuarias y Sasemar para la prestación del servicio general de ordenación, coordinación y control de tráfico portuario marítimo, así como para la realización de labores de coordinación y actuaciones en situaciones de emergencia ocasionadas por contaminación marina. Este acuerdo sigue en vigor en la actualidad.
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Con arreglo a eso, y tras su aprobación por el consejo de administración, la Autoridad Portuaria firmó, el 17 de enero de 2017, un contrato con Sasemar para la prestación de este servicio, contrato que venció recientemente.
El consejo de administración autorizó ayer una nueva contratación con Sasemar, con una duración de un año y un importe de 100.000 euros, IVA excluido.
Además de las maniobras de aproximación, el fondeo y la navegación en aguas interiores de la ría, la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima, integrada en el Ministerio de Fomento, también dirige desde la torre de control de Gijón el servicio general de ordenación las operaciones asociadas a los servicios portuarios, comerciales y otras actividades, así como la gestión y administración relacionada con las operaciones de los buques y la coordinación y actuación en emergencias por contaminación marina accidental. A esto se añaden las comunicaciones radiofónicas entre los barcos y tierra, que quedan grabadas.
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