La Universidad de Oviedo consigue aumentar su presupuesto

El Consejo de Gobierno de la Universidad de Oviedo ha dado hoy el visto bueno a las cuentas de 2025: 254 millones de euros, esto es, un 3,2% más que el presente ejercicio, en concreto, casi 8 millones más. Del total, el Principado aportará 196,7 millones (el 77% del total), de los que 175,7 corresponden al modelo de financiación fijado entre ambas partes para el periodo 2023-2028 y que, por segundo año consecutivo, asegura la cantidad íntegra para el pago de las nóminas de la Universidad, un capítulo que supone 171,5 millones. El año pasado, el Principado destinó a la Universidad unos 182 millones.

Una de las particularidades de este año será la partida que el Ejecutivo destinará para compensar la pérdida de ingresos tras haber decidido que una parte del alumnado tendrá matrícula gratuita en función de la renta familiar. El Principado ha reservado 2,9 millones para ello, que supone aproximadamente un 15% de los ingresos propios de la Universidad (junto a los 7,9 millones previstos por tasas y los 3,5 por becas), según ha explicado el gerente de la entidad, José Antonio Díaz Lago.

Lago ha comparecido en rueda de prensa junto con el rector, Ignacio Villaverde y los vicerrectores de Investigación, Irene Díaz, y de Docencia, Juan Manuel Marchante.

«Es un buen presupuesto», ha defendido Villaverde, «y es fiel reflejo del convenio firmado con el Principado», ha insistido el rector, que no se cansa de repetir la seguridad financiera que ese acuerdo otorga a la institución académica.

El equipo rectoral ha destacado la importancia de la partida de investigación, que superará los 31 millones de euros, en un presupuesto que se ha tenido que adaptar a la nueva estructura de organización, después de las elecciones del pasado mes de abril, así como a la LOSU, la nueva Ley de Universidades, y las muchas novedades que supuso, entre otras cosas, en los contratos docentes. Entre otras cosas, el presupuesto de los institutos se incorpora al de la institución. Además, se reserva un programa de imprevistos, que dependerá directamente del rector.

En lo que respecta a las infraestructuras, se han reservado varios millones de euros para «paliar las carencias naturales derivadas de la existencia de un importantísimo patrimonio de 58 edificios, muchos de ellos de gran antigüedad, necesitados de reformas y adaptaciones importantes». La partida más importante, de 2,2 millones será para el acondicionamiento del antiguo edificio de Minas, en la calle Independencia, donde está previsto trasladar los vicerrectorados. Casi un millón de euros (930.000) irán para obras en la Facultad de Medicina y 561.000 para terminar los traslados aún pendientes a la Escuela Politécnica de Mieres. Habrá también obras en la fachada de la Escuela Superior de Marina Civil, en Economía y Empresa, y en el propio Edificio Histórico. Se acometerá la climatización del edificio Santiago Gascón y la instalación térmica del campus de Gijón.