«Es un símbolo de Asturias que favorece la integración», afirma el Ministerio de Cultura

«En torno a su consumo, siempre comunal, se han desarrollado unos rituales, espacios y ocasiones de sociabilización propios que favorece el encuentro y la integración de la población». El ministerio de Cultura aplaudió ayer la decisión de la Unesco de declarar a la Cultura Sidrera Asturiana como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Porque entiende que «la sidra es un producto de gran riqueza cultural que, además de los saberes y experiencias necesarios para su elaboración y consumo, trasmitidos de generación en generación, se refleja en un vocabulario específico y original en lengua asturiana».

Un conjunto de prácticas, resaltó el ministerio en redes sociales, que constituyen «un elemento identificador de lo asturiano, uno de sus principales emblemas, que estimula la formación y el refuerzo de vínculos sociales que confieren pertenencia y continuidad a la comunidad asturiana».

Lo de echar un culín va más allá, considera el ministerio, ya que defiende que la sidra ayuda a preservar los paisajes de la zona, tanto en su dimensión natural como humana, fija población en territorios rurales, potencia el desarrollo de una gastronomía típica, forma parte de fiestas tradicionales y contribuye a la conservación y transmisión del patrimonio musical y lingüístico».

Recordó el Ministerio de Cultura que la candidatura «fue promovida por el Principado y acordó el Consejo de Patrimonio Histórico en la reunión celebrada en noviembre de 2021 en Menorca». Y que como Cultura Sidrera Asturiana se entiende «todo el conjunto de prácticas vinculadas a procesos de producción, distribución y consumo de sidra natural, que trascienden lo material hasta convertirse en un sentimiento de identidad personal y de pertenencia a la comunidad». España cuenta ya con 22 manifestaciones culturales Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

La declaración de la cultura sidrera como Patrimonio de la Humanidad ha traido consigo también un reguero de felicitaciones. Por ejemplo la de la de l ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, que como hiciera la consejera de Cultura en su intervención en el plenario para defender la candidatura, utilizó el asturiano en su prefil en redes sociales para trasladar las felicitaciones: «Una noticia perbona. Norabona, Asturies».

También la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, utilizó su perfil en redes sociales para felicitar, nada más conocerse la noticia, a todos los que hicieron posible la declaración por parte de la Unesco de la Cultura Sidrera como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. «La Unesco ha reconocido lo que ya sabíamos en Asturias, que la sidra es cultura desde que se planta un manzano hasta que se escancia un culín en cualquier chigre», escribió la delegada del Gobierno.

En redes también se expresó el secretario general de UGT, el asturiano Pepe Álvarez: «Yá ye oficial, la sidra ye patrimoniu mundial». «No me extraña –añadió– porque no hay nada mejor que compartir unos culinos de sidra entre amigos y amigas. ¡Puxa Asturies!».

La declaración de la Cultura Sidrera Asturiana como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad se estrenó ayer en acto oficial en la Junta General. Por primera vez, el acto institucional con motivo de la celebración, hoy, del Día de la Constitución concluyó con un brindis con la bebida tradicional asturiana.

Entre los asistentes se encontraban, además de los diputados, salvo Vox, que decidió no acudir, el presidente del Principado, Adrián Barbón; la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, y el alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli. Todos ellos brindaron por la reciente distinción del sello de Patrimonio Inmaterial de la Humanidad a la Cultura Sidrera Asturiana.

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