El Principado inicia un cese en cadena de interinos para reducir la temporalidad en su plantilla

La cuestión de los interinos pasa así de la disputa política a los despidos. El Boletín Oficial del Principado acaba de publicar la adjudicación de plazas de un concurso de méritos que llevaba lustros sin convocar. El relevo ejecutado afecta a los cuerpos de administrativos y auxiliares. En total, poco más de 110 funcionarios cambian de destino y ocupan plazas vacantes o que cubrían interinos. «Con las adjudicaciones cesan unos 60 interinos, aproximadamente. Si un funcionario de carrera elige la vacante ocupada por un interino, este cesa y vuelve a la bolsa», explican desde la Consejería de Administraciones Públicas.

Es el primer paso dentro de una larga ronda de relevos. Una vez resuelta esta oportunidad concedida a los funcionarios de carrera que estaban dentro, «se les pueden ofertar los destinos a los nuevos funcionarios de carrera de nuevo ingreso de estos cuerpos que aprobaron sus oposiciones hace dos años y que ascienden a 150 personas aproximadamente», detallan. El sistema que viene aplicando el Principado es el de ofrecer preferentemente puestos desempeñados por interinos con tres o más años de servicio. Sostiene que es lo que le marca la Ley de Presupuestos Generales del Estado.

El mecanismo reduce a mayor velocidad la tasa de interinidad, proporción que «no es razonable», según viene repitiendo el Ejecutivo. Se ha puesto como objetivo rebajarla este mismo año del 31% al 6,07% en el ámbito de las consejerías (esto es, excluyendo docentes y sanitarios). Esa hoja de ruta supone que si en diciembre había 2.700 contratos temporales en la plantilla de Administración y servicios, más de 2.000 se verán relevados al final de todos los procesos que se están activando.

«Lo que vamos a ver de aquí a finales de año es un goteo constante de cese de interinos», describe Sergio Fernández-Peña, presidente de CSIF, central mayoritaria en el ámbito de las consejerías. «A finales de junio será el concurso de los puestos singularizados, en julio habrá una cascada de laborales y en septiembre tendremos un gran cese de interinos en el ERA, donde hay casi 300 auxiliares de enfermería, y en los docentes», comenta.

El Principado viene poniendo sobre la mesa dos medidas paliativas para los interinos: reforzar la puntuación de la experiencia en los concursos oposición y buscar un resquicio para mantener a quienes están próximos a la jubilación. Desde el Sindicato Nacional de Trabajadores Temporales (Sitta) consideran que la segunda opción «sería discriminatorio, porque igual uno que está a punto de jubilarse lleva menos años de interino que otro que tiene 50», indica Antonio Navarro. Las medidas, de cristalizar, también llegarán tarde para los ahora cesados, defiende: «Los abogados nos dicen que una vez pierdes el vínculo con el empleador ya no puedes pedir la estabilidad en el puesto, solo impugnar el cese y reclamar daños y perjuicios».