Secciones
Servicios
Destacamos
A. FUENTE
Lunes, 4 de marzo 2019, 03:30
«Estamos completamente destrozados; nadie podía esperar un final así para Pepe», lamentaban ayer familiares de la víctima que circulaba de forma correcta por la autovía A-66 y murió al no poder esquivar al conductor kamikaze. José Ramón Fernández González era una persona muy conocida en Pola de Lena, ya que había regentado un taller de chapa y pintura en pleno centro urbano, en la calla Corporaciones. Tenía 67 años y hacía un año que se había jubilado. El tiempo, destacan ayer sus allegados, lo dedicaba a sus dos grandes pasiones, la pesca -daba igual que fuera de río o de mar- y la caza. De hecho, ayer había cogido sus cañas y se dirigía a la costa para echar el anzuelo. Lo hacía en un todoterreno que había adquirido tras su retiro para poder disfrutar de sus aficiones. Era un vehículo grande, que no lo salvó del brutal choque frontal.
La familia se concentraba por la tarde en el tanatorio de Mieres, donde quedó instalada la capilla ardiente de 'Pepe el Zancas', como era conocido cariñosamente. Estaba casado y tenía tres hijos. El funeral está previsto para las cinco de esta tarde en la iglesia parroquial de Pola de Lena. Posteriormente, será incinerado.
Por otro lado, la Guardia Civil señala que se tendrán que realizar los análisis pertinentes para determinar si el kamikaze, causante del siniestro, conducía bajo los efectos del alcohol u otras sustancias.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Nuestra selección
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.