Pedro Sánchez visita Asturias en plena crisis entre el Principado y el Ministerio de Transportes

Sánchez ha elegido Asturias para gastar su último cartucho antes de entrar en periodo electoral y lo hará de la mano del también socialista Adrián Barbón, uno de los tres presidentes autonómicos que mantuvo el PSOE tras los últimos comicios. Será, eso sí, en medio de una fuerte tensión entre el Principado y el ministerio sobre la que este viernes ambas administraciones se pronunciaban asegurando que existe una buena relación y diálogo fluido entre ellas para defender los intereses de Asturias. «El diálogo constante en cuestión de trabajo en defensa de los intereses de Asturias siempre ha sido fluido», dijo el portavoz del Gobierno de Asturias, Guillermo Peláez, durante la rueda de prensa semanal que se celebra tras el Consejo de Gobierno. «Siempre ha habido relaciones fluidas, nosotros defendemos los intereses de Asturias, y ellos tienen que atender una agenda mucho más amplia que la nuestra», justificó.

«La relación es buena para solucionar los problemas de Asturias», respondieron fuentes del ministerio a la misma cuestión en plena polémica sobre la crisis sin precedentes que existe entre ambas administraciones a raíz del fallido proyecto para el vial de Jove, en Gijón.

Ambas partes responden con mensajes claramente medidos en los que se circunscribe la buena relación a «cuestiones de trabajo» y al interés de ambas partes por «solucionar los problemas de Asturias». De esta forma, tanto el Gobierno regional como el ministerio tratan de salir al paso de las informaciones que hablan precisamente de comunicación poco fluida, de desconfianza mutua y de filtraciones que evidencian que las relaciones están, sino rotas, sí muy dañadas. Una crisis entre ambas administraciones que se ha hecho pública a raíz de lo ocurrido con el vial de Jove y al posicionamiento del presidente autonómico, Adrián Barbón, junto a la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, en este polémico asunto.

Los continuos incumplimientos y retrasos en las obras correspondientes a este ministerio en Asturias han motivado que en varias ocasiones el presidente del Principado manifestara públicamente su malestar e incluso hartazgo, aunque no fue hasta ahora cuando Barbón se quejó de la falta de compromiso de este departamento con Asturias y también de su escasa credibilidad. Barbón pidió «hechos y no palabras» al departamento que ahora lidera Óscar Puente y, aunque siempre ha sido especialmente benévolo con la figura del ministro, no tuvo miramientos con los anteriores responsables ni tampoco con la Delegación del Gobierno, a la que ha señalado en dos ocasiones a la hora de pedir responsabilidades por lo ocurrido tanto con el vial de Jove como con el nudo de Serín.

Por su parte, fuentes del ministerio se refieren a Adrián Barbón como «desleal» por su estrategia política, enfrentándose al ministerio en lugar de tratar de calmar las aguas tras la decisión de este departamento de paralizar por cuestiones de seguridad un proyecto con años de retraso que fue licitado a escasos días de comenzar la campaña electoral y para el que ahora se ofrece una alternativa mucho menos ambiciosa.