«Vamos con una pala en el coche para quitar la nieve de la carretera y poder pasar»

«El estado de la carretera AS-394 es pésimo. En verano le hicieron un lavado de cara que ni siquiera llega a todo el tramo, que son siete kilómetros, y que desaparecerá con la primera nevada. Necesitamos una adecuación para seguir dando vida a la zona», aseguró el portavoz del colectivo, Sergio Castañeira. La carretera «sin firme estable», tiene también problemas con el agua. «Hay que hacer cunetas y mejorar la señalización, con palos para la niebla», destacan los usuarios de la vía.

No son pocos. «La carretera tiene bastante tránsito. Une el Principado con la provincia de Lugo, con Fonsagrada. La utilizamos para ir a los Ayuntamientos de los Oscos, para bajar a Vegadeo e incluso para ir a la zona de la Mariña lucense, Navia y Jarrio, al hospital», explica Castañeira. Vecino gallego muy cercano al límite asturiano, asegura que el mal estado de la AS-394 «crea la frontera entre Asturias y Galicia». «La parte gallega está bien aglomerada y no se llena de agua. Y aquí son solo siete kilómetros», denuncia.

Al grito de «menos farsa y mas asfalto», Jorge Rico, de Ventorrillo, aseguró que «cuando hay nieve se olvidan de la carretera, y a veces pasa un mes sin que se limpie». Una sensación de abandono que comparte Tere Álvarez, vecina de Pousadoiro (Santa Eulalia de Oscos). «Estamos abandonados totalmente, en tema de servicios y carreteras. y cada vez la gente está más envejecida», destacó. A la protesta, acudió también la diputada del PP Cristina Vega, que llevará este problema a la Comisión de Fomento.