«El hombre que mató a Juan Carlos saldrá de la cárcel, pero la pena estará siempre»

Más de un centenar de personas acudieron ayer a las viviendas de Los Xixarros, en la carretera de Arlós, donde se celebró el velatorio más íntimo en memoria del fallecido. Precisamente, en una de las casas, la de color gris, nació Juan Carlos hace algo más de dos décadas. Allí dio sus primeros pasos antes de acudir al colegio público del municipio y mudarse, junto a sus padres, a la recta de Coruño. Fue en el Instituto de Posada donde desarrolló su pasión por el fútbol, que posteriormente complementaría con la guitarra. «Sabía mucho, subía videos a las redes y todo», aseguraron sus allegados.

Una vez finalizada su etapa de estudiante, Juan Carlos decidió seguir los pasos de su padre, Ramón, en el negocio familiar, dedicado a la ganadería. «Le ayudaba en un par de fincas en las que tienen ovejas, cabras y yeguas», explica el primo hermano del fallecido, Gabriel Jiménez. «Iban a todas las ferias y participaban activamente en la vida social de municipio», añade.

Hasta Los Xixaros también acudió el regidor del concejo, el socialista Gerardo Sanz, y un agente de la Policía Local, en representación del cuerpo, para dar el pésame a la familia del fallecido. Sanz, visualmente afectado, fue muy escueto: «Sigo impactado». El mandatario fue uno de los primeros en llegar al kilómetro 19,1 de la AS-17, después de que se produjese la tragedia. «Es una pena que un chico de aquí, de siempre, terminase así», dijo a los familiares. A lo que ellos le respondieron: «Agradecemos mucho que se haya preocupado por nosotros». La última despedida al joven Juan Carlos tendrá lugar hoy a mediodía en el cementerio parroquial de Lugo de Llanera. «Vamos a ser muchos y eso es una muestra evidente de lo que se le quería aquí», concluye su primo.

Tras huir de la Policía, en la Avenida de Oviedo, en Gijón, cometer un homicidio y volver a fugarse, Constantino N. M. fue detenido finalmente en Posada de Llanera por los agentes de la Policía Local de Gijón, en colaboración con la Guardia Civil. Inmediatamente fue trasladado a Oviedo, donde ayer por la mañana pasó a disposición judicial.

En un principio, la Fiscalía del Principado solicitó su ingreso inmediato en prisión provisional sin fianza al considerar que existe «riesgo de fuga». Una decisión que se materializó ayer después de que el juez le atribuyese los delitos de conducción temeraria en relación con un delito de homicidio imprudente, abandono del lugar del accidente y conducción sin carné, con el agravante de reincidencia.