«No es el final de nada, hay que trabajar para aprovecharla al máximo», dice Fade

Por esto mismo, la presidenta de Fade, feliz ayer y muy conversadora con el presidente de la Federación de Empresarios de León, Juan María Vallejo, durante el viaje, subrayó que a pesar de que la apertura de la variante es «un paso tremendamente importante, que abre una nueva etapa», esto «no es el final del camino. Hay que seguir trabajando para aprovecharla al máximo».

El presidente de la Cámara de Oviedo, Carlos Paniceres, profundizó en la misma idea. Dice que hay que «aprovechar esta infraestructuras para que tenga retornos inmediatos para Asturias». Y añadió que los empresarios van a «empezar a hablar con los operadores para que haya frecuencias y tarifas y para que cuando llegue la liberalización la oferta sea mucho mejor». Paniceres pensaba ayer en opciones de mejora: «¿Por qué no es posible una lanzadera Gijón-León para poder enlazar con el primero de la mañana de Madrid?». E incitó al empresariado asturiano para que piense en «paquetes de transporte también» o en ofertas conjuntas con la Cámara de León «para aprovechar los dominios de esquí, hablando de Fuentes de Invierno, Pajares y para hacer crecer a Leitariegos».

Daniel González, de la Cámara de Avilés, piensa en la «conectividad con Madrid para viajes de negocios en el mismo día» y para «fomentar el turismo de congresos», y considera que Avilés, como «puerta del Occidente» y «cabecera de una comarca con 125.000 habitantes, debería «tener dos frecuencias diarias».

Por la Cámara de Gijón, su vicepresidente, Pedro López-Ferrer, indicó que «esta infraestructura debe seguir evolucionando y se debe continuar con los proyectos y trabajos necesarios para culminar la llegada definitiva de la Alta Velocidad a Asturias, que es completar con el triple hilo los tramos León-Campomanes y Lena-Gijón». Añadió, en positivo, que «supondrá un impulso al turismo, favoreciendo la desestacionalización e impulsando el sector congresual».