Malestar por la dureza del examen de Química de la EBAU en Asturias: «Fue leerlo y quise morirme»

Los responsables de los centros educativos reconocen que la materia por la que se preguntaba sí estaba en el temario, pero al mismo tiempo admiten que «las quejas de los alumnos han sido muchas, vamos a mirar la prueba con la responsable del área», explicaba el director del IES Montevil, César Suárez.

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Quejas masivas que también llegaban por parte de los alumnos del colegio Corazón de María de Gijón, su director, Simón Cortina, explicaba que «la profesora responsable de Química entiende que se trató de una prueba con muchos cambios respecto a otros años. Un examen que en anteriores convocatorias era asequible y predecible se ha convertido en algo inesperado».

También en el IES Jovellanos, los alumnos que se enfrentaban a esta prueba manifestaban a sus profesores su malestar por los problemas planteados en dicha prueba. El director del centro, Juan Carlos Ayllón, reconocía no ser un experto en la materia, pero apuntaba que «mi hijo y sus amigos salieron igual de disgustados que mis alumnos». Le apuntaron que «lo enfocaron por cosas que hemos trabajado poco, e incluso que no hemos visto». Ayllon apostillaba que «lo preocupante es que a algunos alumnos con exámenes tan complicados se les puede hacer una jugada muy sería, ya que es posible que su nota media disminuya, algo que no tiene por qué pasar en otras comunidades que mantendrán una nota superior a la asturiana».

Ese es el temor de Claudia Suárez, que llegaba desde Mieres, y que tras enfrentarse a la prueba de Química subrayaba que «estuve unos minutos pensando cómo enfrentarme a los problemas, en realidad no se que esperar. Espero que no me baje mucho la nota que necesito». Su compañero David Martínez apostilló que «lo típico es preguntar por redox y electrólisis, pero nos hicieron la faena».